El paso de los latinos más exitosos en la NBA
No son muchos los latinoamericanos que llegan y logran mantener un alto rendimiento en la mejor liga de básquetbol del mundo. Sin embargo, hay algunos que han dejado una huella imborrable y que incluso son o han llegado a ser considerados la estrella de su equipo.
Cuando se habla de jugadores latinos que hayan dejado una marca en la mejor liga de básquetbol del mundo, hay que mencionar a Manu Ginóbili. El argentino de 46 años, pasó toda su carrera en los San Antonio Spurs luego de ser seleccionado en la posición 57 del draft del 2001. Con las espuelas logró conquistar cuatro anillos de campeón, formando un dominante big three junto al francés, Tony Parker y a la leyenda estadounidense, Tim Duncan.
La carrera de Manu no se queda ahí, sino que contó con dos apariciones en el juego de estrellas, una en 2005 y otra en el 2011, además de ser elegido como el mejor sexto hombre del año en 2008. Su estilo de juego elegante y a la vez agresivo, lo ha llevado a ser comparado con la estrella de Los Ángeles Clippers James Harden, considerado uno de los mejores anotadores de la liga en la última década. El argentino finalizó su carrera promediando 13,3 puntos por partido, 3,5 rebotes y casi cuatro asistencias.
Otro nombre a considerar es el del puertorriqueño José Juan Barea, que, tras no ser seleccionado en el Draft del 2006, decidió participar en varias ligas de verano, hasta que, en octubre del mismo año, firmó un contrato con los Dallas Mavericks. A pesar de contar con una estatura considerada baja para la liga con 1,78 metros, supo entender su rol y ganarse un puesto en la titularidad del equipo, llegando a ser el segundo jugador de su país en obtener un anillo de campeón, luego de derrotar en la final del 2011 a los Miami Heat de LeBron James.
El veterano jugador dominicano de 37 años, Alfred Joel Horford Reynoso (o simplemente Al Horford), ha sabido hacerse un nombre a lo largo de sus años en la liga. Si bien es conocido por su identificación con los Boston Celtics, lo cierto es que Horford llegó a la NBA tras ser elegido en la tercera posición del draft del 2007 por los Atlanta Hawks. Sus buenas actuaciones en el baloncesto universitario de Estados Unidos, le valieron llegar con grandes pergaminos a la liga.
Si bien hasta ahora no lo ha logrado coronarse campeón de la NBA, si es el primero de su país en participar en el juego de estrellas y formar parte de uno de los mejores quintetos de la liga (2011), además de formar parte del segundo mejor equipo defensivo el año 2018.
Nuevas generaciones
Actualmente la bandera parece estar en buenas manos, pues hay ciertos jóvenes latinos que se están haciendo un nombre dentro de la liga. Uno es el dominicano Karl-Anthony Towns. El pívot de 2,13 metros de estatura, fue elegido en la primera posición del draft del 2015 por los Minnesota Timberwolves, convirtiéndose en el primer latino en ser seleccionado dicha posición.
En su primer año promedió 18,3 puntos y 10,5 rebotes, lo que le valió para quedarse con el premio a Rookie del Año, además de escalar rápidamente en el nivel de importancia para el equipo, hasta hoy por hoy ser considerado la estrella principal de la franquicia. En el presente, con una marca de 24 victorias y 9 derrotas, lideran la Conferencia Oeste, siendo uno de los principales candidatos a quedarse con el anillo de campeón esta temporada.
Otro que a pesar de estar comenzando su periplo en la NBA está llamando la atención mediática, es el mexicano Jaime Jáquez Jr. Fue seleccionado en la decimoctava posición del draft del año pasado por los Miami Heat proveniente de la Universidad de California (UCLA), donde promedió 13,4 puntos y 6,3 rebotes.
El alero es el único latino con posibilidades reales de ganar el Rookie del Año, pues se encuentra en la tercera posición en la carrera por dicho galardón, solo detrás de Chet Holmgren (Oklahoma City Thunder) y Victor Wembanyama (San Antonio Spurs), seleccionados en la segunda y primera posición respectivamente.
En lo que va de temporada, con treinta minutos por partido, está promediando 13,7 puntos, 3,9 rebotes y 2,6 asistencias, tomando un rol cada vez más importante dentro de la rotación equipo que se encuentra en el cuarto puesto de la Conferencia Este.
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