Al igual que con Coquimbo, Colo Colo buscaba el triunfo en la última jugada del partido, ahora ante Cobresal. Envió a casi todos sus jugadores. Entre la desesperación ofensiva de los albos y la impericia defensiva de los mineros, Maximiliano Falcón terminaba revolcándose y gritando en el suelo luego de un tumulto en el área. En el Monumental clamaban por el VAR.

La repetición era contundente: Pablo Cárdenas efectúa una dura entrada sobre el defensor uruguayo del Cacique. Francisco Gilabert, juez del encuentro, fue a revisar la jugada. Sin embargo, cuando todos esperaban la pena máxima, el árbitro decidió no sancionar.

De convertirse en gol ese penal y con los resultados que se produjeron este jueves, Colo Colo podría haber zafado de cualquier opción de descender.