Uno de los grandes legados que dejarán los Juegos Panamericanos y Parapanamericanos Santiago 2023 es la construcción de infraestructura de primer nivel para el deporte chileno. La mayor parte de estos recintos se encuentran en el Parque Deportivo Estadio Nacional, que quedó con una sorprendente y remozada cara con la llegada de estos nuevos centros.
El paño de 64 hectáreas y de $ 240.017.853.000 de inversión, hoy se encuentra conformado por el Centro Acuático, el Centro de Deportes de Contacto, el Centro de Entrenamiento Paralímpico, el Centro de Raquetas, el Centro de Deportes Colectivos, el Centro de Entrenamientos de Atletismo Mario Recordón, el Centro de Entrenamiento del Hockey Césped, la explanada de deportes urbanos, el Polideportivo y el Patinódromo.
La mayoría de estos recintos son nuevos o presentan importantes remodelaciones, por lo que hoy se presentan como activos para el deporte chileno. Sin ir más lejos, un grupo de federaciones envió una carta solicitándole al Presidente Gabriel Boric que abogue por el uso de esta infraestructura, además de agradecerle por el éxito de los Panamericanos.
“Le solicitamos se nos faculte la administración sustentable y responsable de la infraestructura y equipamiento panamericano, así como parapanamericano, con una base de financiamiento asegurado con glosa específica en el presupuesto de la Nación. Tenemos el conocimiento, los técnicos, el entusiasmo y el sueño de seguir creciendo”, expresaron.
Con un costo anual de $ 6.500 millones, el Instituto Nacional de Deportes (IND) llevará a cabo un ambicioso plan de uso de las instalaciones. Así lo explica Israel Castro, director de la entidad, quien además detalla cómo será la convivencia con el fútbol, que aspira a regresar a partir del primer trimestre del próximo año.
“El Estadio sufrió su transformación más importante en sus 85 años de vida. Hoy, el coliseo que recibe el fútbol tiene que convivir con otros recintos deportivos, con un parque y además con espectáculos masivos. Entonces, desde el IND debemos armonizar a todos los actores que requieren su uso, pero además para nosotros la ciudadanía es tremendamente importante. El Parque debe ser un espacio de encuentro, y la realización de fútbol no puede afectar su entorno”, plantea.
En ese sentido, reconoce que el proceso va a requerir de una adaptación: “Como no existe una obra similar en el país, obviamente viviremos un proceso de aprendizaje, que es natural. Pero tenemos resuelto todo lo financiero para su administración y esto da una tremenda tranquilidad. Este parque va a ser ocupado de la mejor manera posible”.
Seguros y costos
Otro de los asuntos que observan con atención en el gobierno es el regreso del fútbol al Nacional. La fecha tentativa para el retorno es febrero, siendo la U, la UC y la Selección los principales interesados en el uso del coliseo. “Entendemos la importancia que tiene para el fútbol el Coliseo. Por eso esperamos que se vuelva a utilizar durante el primer trimestre del próximo año”, anticipa Castro.
Frente a eventuales destrozos protagonizados por las barras bravas, el IND tomará resguardos. “En los contratos del fútbol siempre existe una cláusula que asegura el pago si ocurren daños o externalidades negativas, y en este caso considera a todo el parque y las nuevas obras. Debemos velar por que cada uno de los nuevos recintos mantenga su calidad, su estética y protegerlos de todos los que piensan en destruir. Para eso, el trabajo y compromiso del fútbol es muy importante”, manifiesta.
En cuanto al uso de las selecciones de otros deportes, anuncia un trabajo de coordinación con las federaciones deportivas. “Tenemos unos centros que son de gran categoría, y esto nos permitirá ir creciendo en el alto rendimiento”, sostiene.
Una de las preguntas más recurrentes que surge es si las federaciones deberán pagar por concepto de arriendo. Israel Castro aclara este punto: “El IND cubre el gasto operacional de todas las federaciones. Pero ahora tenemos que ver cómo esto llega a la ciudadanía. Una de las lecciones que extraemos de Santiago 2023 es lo accesible de las entradas. En el mundo de la cultura existe Teatro a Mil, y también debemos apuntar a que se proyecte una cartelera de actividades cuyo precio permita el acceso masivo. En ese sentido, es crucial el trabajo con las federaciones para lograr una cartelera deportiva permanente, que sea entretenida y llamativa”, precisa.
Si bien varias de las federaciones que solicitan administrar los recintos no son Federaciones Deportivas Nacionales, el director del IND puntualiza que los requisitos no vendrán por ese lado, sino que por otros criterios. “En esto, el Plan Olímpico tiene mucho que decir. Desde acá, seguramente, existirá la priorización del recinto en virtud de los deportes que son claves en el Ciclo Olímpico. Esto no pasa por ser Federación Deportiva Nacional, es una mirada más técnica-metodológica”, complementa.
La propuesta de Orrego
En esa misma línea, el gobernador de la Región Metropolitana Claudio Orrego, también tiene una visión sobre el uso del emblemático recinto ñuñoíno, en la que plantea algunas iniciativas.
“Aquí la clave es garantizar el acceso al alto rendimiento, pero también democratizar el acceso a estas infraestructuras. Esto no puede ser solo para las selecciones. Tiene que ser para la ciudadanía, para campeonatos intercomunales, interregionales. Para mí, tenemos el punto de partida, pero lo que viene ahora es llenarla de contenido, de uso y mantenerlas como corresponden”, parte señalando.
Es por ello que el exintendente postula una idea de gestión distinta. “Yo voy por buscar un punto intermedio. Más que entregárselo a las federaciones, donde algunas funcionan bien y otras no tan bien, y por dárselas al IND, yo exploraría el modelo inglés de una corporación especialmente destinada a administrar con esta doble dimensión. Esto no puede ser solo para el alto rendimiento. También tiene que ser para que la ciudadanía, los clubes, el nivel competitivo, quizás más amateur, pueda acceder también a esta infraestructura que es de todo Chile. No es solamente de una federación en particular. Yo me la juego por ese tema, pero obviamente estoy abierto a evaluar los pro y los contra de cada uno”, propone.
Sobre lo visto en los Panamericanos, Orrego no oculta su emoción: “Rompe varios mitos. El primero, que el único deporte en Chile es el fútbol. Que la gente no está dispuesta a pagar por ver otros deportes. Que la gente no está dispuesta a ver en televisión otras disciplinas deportivas. Así, como se batieron récords deportivos, en estos Juegos se rompieron récords de audiencia y de participación ciudadana que tenemos que tomar en cuenta”.
“Esta fue una fiesta en muchas dimensiones. Ver el Nacional lleno con lluvia y sin lluvia, corriendo Chile o no, da cuenta de que tenemos un potencial para hacer nuevos eventos tantos los internacionales como nacionales o regionales”, concluye.
Sin ir más lejos, luego de los Juegos Parapanamericanos, que se desarrollarán entre el 17 y el 26 de noviembre, el Parque Estadio Nacional recibirá dos eventos que conjugan los ideales a los que aspiran las autoridades: el mundial de hockey césped femenino juvenil (29 de noviembre al 10 de diciembre) y los Juegos Sudamericanos Escolares (5-8 de diciembre). De ellos, este último contará con más de 2 mil niñas y niños de 12 países.
Todo ello demuestra que el deporte chileno comienza a acercarse a otra dimensión, la de satisfacer a una sociedad ávida de acercarse al deporte después de la gran experiencia de Santiago 2023. Y para ello, el acercamiento de la infraestructura es un gran primer paso.