El gesto de Marcelo con Luciano Sánchez tras provocarle la escalofriante lesión que lo mandó al hospital

Una de las imágenes más dramáticas en años fue la que ofreció la gravísima lesión que tuvo el jugador de Argentinos Juniors Luciano Sánchez, quien fue fracturado por el reconocido Marcelo, en el duelo entre los transandinos y Fluminense por los octavos de final de la Copa Libertadores.

Corría el minuto 55 de partido, cuando el exlateral del Real Madrid comenzó a eludir rivales y le salió al paso el transandino. Logró eludirlo, pero lo pisa a la altura de la tibia, provocándole una terrible lesión en la rodilla, debido al movimiento que realizó. El episodio impactó de inmediato al astro amazónico, quien rompió en llanto frente a la situación, siendo consolado por sus compañeros.

Naturalmente, el juez chileno Piero Maza no dudó en expulsarlo tras la revisión del VAR. El legendario jugador aceptó sin ninguna protesta la medida y abandonó la cancha del Diego Armando Maradona visiblemente acongojado.

Mientras tanto, el lateral de 29 años fue trasladado en ambulancia desde La Paternal al Hospital Finocchieto, donde está siendo sometido a estudios para determinar los alcances de la terrible entrada, que preliminarmente arrojaron una luxación completa de la rodilla, lo que probablemente signifique una largo y complejo proceso de recuperación tras a cirugía a la que deberá someterse.

Una vez finalizado el encuentro y frente a la gravedad de los hechos, Marcelo tuvo otro gesto de preocupación con su colega lesionado: se trasladó al vestuario de Argentinos Juniors para solicitar el número de teléfono de Sánchez, y así poder estar al tanto de todos los detalles de su recuperación.

El encuentro terminó igualado 1-1, luego de que Samuel Xavier pusiera el empate en el minuto 87. Había abierto el marcador el conjunto local, a través del paraguayo Gabriel Ávalos, mientras que a los 76′, fue expulsado Alexis Martín Arias, el portero de Argentinos Juniors y recordado por sus pasos por Unión La Calera y O’Higgins. Esa roja obligó a utilizar a un jugador de campo en el arco, ya que los Bichos Colorados habían agotado las sustituciones.