El preocupante abandono de las nuevas canchas de hockey césped del Nacional

En marzo de 2022, días antes que el Presidente Sebastián Piñera dejara el Gobierno, se hizo aceleradamente el corte de cinta del único recinto comprometido para Santiago 2023 listo en ese momento, el campo de hockey césped del Estadio Nacional, para dejar a la cartera de Deportes con algún legado de la gestión que lideró durante todo el período la ministra y otrora presidenta de la Corporación Santiago 2023, Cecilia Pérez.

A un año de aquella instancia, La Tercera pudo constatar in situ el notable abandono y deterioro del recinto que hoy administra el Instituto Nacional de Deportes, pero que consultando sobre la operación del mismo, se encuentra a la deriva por líos administrativos.

El recinto que es parte del plan amparado en el “Parque Estadio Nacional” como parte del legado de los Juegos Santiago 2023, no cuenta con recurso humano para la administración, no hay nadie que lo mantenga y gestione la nueva infraestructura que hoy presenta daños en la carpeta del campo de juego, las oficinas se usan como descanso de personal ajeno y los Diablos y Diablas se tienen que adaptar a los turnos de los guardias que dispone el Estadio Nacional para poder realizar sus entrenamientos.

Y es que la infraestructura que tuvo un monto de inversión de $ 6.500 millones al ser entregada no tenía un plan de gestión y administración acorde a lo que sería la casa de las selecciones nacionales de hockey césped, debiendo estas seguir pululando en los clubes privados en donde se practica la actividad.

Todo en tanto la Federación Chilena de Hockey Sobre Césped (FEHOCH) intentó y presentó una serie de medidas y propuestas de administración del recinto en el lógico raciocinio de que el ente que rige la actividad de objeto del recinto colabore en la gerenciación del estadio, iniciativa que no ha recibido respuesta.

Consultado el presidente de la FEHOCH, Andrés de Witt, indicó que “francamente hemos sido lo más proactivos posible luego de haber cumplido un sueño tan grande como el que nuestras Diablas y Diablos tuvieran casa propia. Lo único que puedo comentar es que estamos a total disposición para seguir cooperando en lo que se pueda para afrontar los próximos desafíos propios de la disciplina y, por supuesto, los Juegos Santiago 2023″.