A Gianni Infantino se le pueden criticar muchas cosas. El suizo lo debe tener asumido. El rol de presidente de la FIFA implica estar siempre en la primera línea de los comentarios generalizados y, tratándose del fútbol, tampoco es muy esperable que la mayoría sean elogios.

Lo que el mandamás del balompié no le puede reprochar nadie es que se maneje con un doble discurso. De hecho, el que utiliza parece tan bien aprendido que es capaz de replicarlo para dos situaciones idénticas, pero con federaciones distintas y con casi 24 horas de diferencia. Para cerciorarse, basta con revisar sus redes sociales.

Es lo mismo, pero no es igual

Para referirse a la cita con la comitiva chilena, Infantino tuvo palabras que reconocían la trascendencia del encuentro. “Fue un placer reunirme con los delegados de la Federación de Fútbol de Chile para conversar sobre el desarrollo del fútbol en todos sus niveles, en este país amante del deporte rey”, abrió en el mensaje que publicó en su cuenta en Instagram.

Añadió: “Le agradecí al presidente Pablo Milad por su apoyo e interés en los diversos programas de desarrollo de la FIFA, destinados a hacer que nuestro hermoso deporte sea accesible para las niñas y niños de su país”. Después del punto final, utilizó el emoticón de un apretón de manos.

¿Y a Macedonia?

Para Macedonia del Norte también hubo palabras. Y también conceptuosas respecto de la cita con el timonel Muamed Sejdini. O, en rigor, las mismas. Eso sí, cambia el idioma. Infantino opta por el universal inglés. “Fue fantástico reunirnos con delegados de la Federación de Fútbol de Macedonia del Norte para discutir el desarrollo de infraestructura y cómo el programa FIFA Forward puede apoyarlo”, manifiesta el suizo.

El segundo párrafo de la reflexión plantea la misma idea que el que le dedicó al encuentro con Milad. “También me complació enterarme de las mejoras en curso en el Centro Nacional de Entrenamiento y agradecí al presidente de @ffmacedonia, Muamed Sejdini, por su compromiso de difundir la alegría del fútbol en su hermosa nación”, escribe.

¿Falta algo? Nada, porque el mensaje también se cierra con el emoticón del apretón de manos. El mismo de la cita con Milad.

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