El primer cara a cara entre Pellegrini y Sampaoli, protagonistas del derbi andaluz

En la jornada de este domingo se vivirá un derbi diferente en la capital andaluza. Si bien serán los mismos rivales, Betis contra el Sevilla, la estirpe de los técnicos que se enfrentan encenderá el morbo del encuentro. Por primera vez en la historia, el chileno Manuel Pellegrini y el retornado argentino Jorge Sampaoli se medirán como entrenadores en un cancha de fútbol, la del Benito Villamarín, la casa de la institución verdiblanca.

La misma añeja rivalidad, pero con realidades muy opuestas. El elenco del entrenador santiaguino enfrenta el duelo con su equipo en la cuarta posición de LaLiga, en los puestos de la próxima Champions, justo después de avanzar directamente a los octavos de final de la Europa League.

Al otro lado, el club nervionense pasa una de sus peores crisis después de veinte años. La escuadra está en el décimo octavo puesto de la clasificación, en zona de descenso. Todo producto de dos victorias, cuatro empates y seis derrotas en una docena de encuentros disputados.

Sin embargo, el ex técnico de Manchester City no se fía del mal momento del archirrival, una plantilla muy fuerte con el cuarto presupuesto más alto de los 20 equipos que conforman la competencia.

“El primer error antes del partido es decir que la tabla indica al favorito. Los derbis son partidos distintos. Llegamos en un momento de confianza, pero vamos a jugar ante un equipo de Champions. Así lo dice el nivel de sus jugadores y el costo de su plantilla”, confirmó el ex West Ham United.

“Momentos como este te van dando confianza. No podemos hacer algo diferente a lo que hacemos. Esta madurez nos permite seguir creciendo, no podemos conformarnos con momentos puntuales. Vamos por el camino correcto. Estamos en puestos de Champions en LaLiga, pero queda mucho camino todavía”, dice respecto del presente de su escuadra.

Sobre la fórmula para derrotar al equipo de Sampaoli, el Ingeniero asegura: “Tenemos que hacer un partido correcto en defensa y ataque, ante un rival que pasa por un mal momento. Pero la situación del Sevilla hoy no es algo normal”.

Cada uno en su singularidad, se trata de dos entrenadores que lograron hacerse un nombre en el fútbol actual. Muchas veces aludidos entre ellos, pero que el destino nunca había juntado en una cancha de fútbol.

Una serie de elogios a la distancia y algunos desencuentros puntuales. Comentarios tangenciales que finalmente tendrán un reconocimiento público de ambas partes en el campo del Benito Villamarín, casa de los béticos, en uno de los clásicos regionales más efervescentes de LaLiga. Una relación que, sin ser directa del todo, siempre llevó al Ingeniero hablar del casildense. Lo mismo en sentido contrario. El 6 de junio, en el Benito Villamarín -la casa de los béticos- se verán las caras.

Al margen de los estilos de juego y de las diferencias estratégicas, el respeto entre ambos adiestradores nunca se escondió. Así, al menos, quedó reflejado en las declaraciones del argentino después de disputar la Copa del Mundo de Brasil con la Roja.

“Ojalá que me suceda un técnico chileno, no podría decir quién”, contestó el transandino en diciembre de 2014. Sin rodeos, incluso, el actual DT del Sevillla nombró al chileno como reemplazante, mucho antes de que se marchara, en enero de 2016.

“Yo creo que el técnico ideal es Manuel Pellegrini. Acá no escucho tanto reconocimiento a alguien que realmente se ha ganado un respeto en el extranjero. Hoy por hoy, merecería ser parte de un proyecto de selección”, reconoció el ex adiestrador de la Universidad de Chile, ganador del único torneo internacional de los azules: la Copa Sudamericana de 2011.

Sin embargo, el actual adiestrador bético rechazó de plano la propuesta de su colega. No tanto por la procedencia de las alabanzas, sino más bien por el tipo de proyecto que le convence.

Precisamente, esa fue la primera vez de las muchas en las que Pellegrini rechazó dirigir en la Roja, en público y privado, cuando su nombre asomaba como candidato al cargo.

“Encuentro que el trabajo de selecciones tiene poca cancha. Me gusta más dirigir clubes. Me gustaría seguir en Europa la mayor cantidad de años que pueda”, aclaró el DT de los verdiblancos, a mediados de 2015.

Más aún, insistió directamente frente al zurdo. “No tengo ninguna intención de asumir ahora, para que le quede claro a Sampaoli”, planteó.

A comienzos del 2018, Sampaoli estaba al mando de la selección argentina, equipo con el cual se quedaría en la segunda ronda de la Copa del Mundo de Rusia, en julio del mismo año, un proceso en el que Javier Mascherano, el Jefecito como le puso Marcelo Bielsa, era un jugador clave para el casildense. Justo en los días en los que se fraguaba la partida del futbolista desde a Barcelona a Hebei Fortune, el transandino envió un mensaje al Ingeniero, entonces técnico del cuadro chino. “Mascherano nos puede servir en un montón de lugares estando bien... Lo que esperamos es que ojalá tenga la posibilidad de jugar muchos partidos, más allá de que sea el fútbol chino, que es distinto”, advirtió el zurdo.

Esa vez, el encargo al chileno fue directo. “Ojalá que Pellegrini lo tenga en cuenta en la posición de volante central, que hace mucho tiempo no la tiene en su equipo”, planteó.