Se acabó la espera. Las fichas están sobre la mesa. El torneo de selecciones femeninas más importante de esta parte del continente se pone en marcha hoy, en Chile, entre La Serena y Coquimbo. Para la Roja será la oportunidad de demostrar que los meses de preparación, que la reactivación del trabajo para un combinado que estuvo literalmente botado, valió la pena.
Todo con Christiane Endler, la mejor futbolista chilena de todos los tiempos, a la cabeza. Desde Francia, la arquera y capitana liderará a un grupo que también componen otras nueve jugadoras que provienen de latitudes como Colombia, España, Brasil, Japón y Estados Unidos, además de las seleccionadas locales que aporta, principalmente, Colo Colo.
Será la primera vez que el torneo se dispute en suelo nacional. En las anteriores siete ediciones ya lo hizo en Brasil, Argentina y Ecuador. Claro que en sus inicios fue un torneo en que apenas participaban algunos combinados. En el primero de ellos, en 1991, solo la Roja junto a Brasil y Venezuela dijeron presente. Las chilenas y las brasileñas son las únicas que han estado en todos los torneos oficiales, por más o menos profesionales que fueran. Y, era que no, la Canarinha de mujeres es la más ganadora de la Conmebol, con seis de los siete trofeos en sus vitrinas. La única vez que lo perdieron fue en 2006 a manos de la local Argentina.
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La Portada albergará el Grupo A y la fase final. Foto: Agencia Uno.[/caption]
Chile ostenta como mejor participación el segundo lugar de 1991. También tiene dos terceros puestos: en la edición de Brasil 1995 y la de Ecuador 2010, donde despuntó la brasileña Marta, quizás si la mejor jugadora de todos los tiempos.
Repetir una de esas actuaciones le permitiría al equipo que dirige José Letelier acceder al menos a dos de los tres torneos que buscan a sus representantes sudamericanos: Mundial de Francia 2019 (clasifican las dos primeras y la tercera va al repechaje); Juegos Panamericanos Lima 2019 (clasifican las cuatro primeras) y Juegos Olímpicos Tokio 2020 (clasifican las dos primeras).
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El estadio Francisco Sánchez Rumoroso, sede del Grupo B. Foto: Diario El Día.[/caption]
La organización del torneo no estuvo ajeno de polémicas. Y fue donde menos debiesen existir: el estadio Diaguitas de Ovalle, el que albergaría cuatro partidos, se bajó como sede a menos de una semana del torneo por el deplorable estado de su cancha. La organización optó por dejar sólo a La Serena y Coquimbo como anfitriones, existiendo nula autocrítica.
La fiesta se pone en marcha hoy. Colombia y Uruguay abren los fuegos. Luego será el turno de Chile ante Paraguay. La fiesta comienza.