El Real Madrid llegaba con una clara ventaja al duelo de revancha con el Chelsea y más encima lo jugaba en su casa, el estadio Santiago Bernabéu. Pese al dominio inicial, los merengues nunca pudieron inquietar el arco de los ingleses y la visita no solo supo aprovechar esa falta de definición, sino también pudo abrir el marcador en la primera chance que tuvo: Timo Werner habilita a Mason Mount y este, con un remate de derecha, desde el centro del área, anota el 0-1 y deja el global 3-2 (15′).
Entonces, se esperaba el despertar de los de Carlo Ancelotti. Sin embargo, siguieron dormidos y se fueron al descanso sin inquietar la portería de Édouard Mendy.
El regreso de los anfitriones fue una pesadilla, porque a los 51′ Antonio Rüdiger le gana el cabezazo a toda la defensa local y clava la pelota muy lejos de las manos de Thibaut Courtois, para poner el 0-2 e igualar la serie.
La misma que pudo ser desnivelada en la hora de juego, cuando Marcos Alonso clavó su remate en el ángulo contrario de la portería madridista, pero el VAR le anuló la conquista por una más que polémica mano previa al disparo mencionado.
Y si bien Karim Benzema pudo cambiar la historia, ya que su cabezazo se estrelló en el travesaño (66′), fue el alemán Timo Werner quien, en gran jugada personal -amagó dos veces antes de rematar- puso el 0-3 (75′) y mandaba los boletos a las semifinales para Londres.
No obstante, nunca hay que dar al Real Madrid por muerto y así lo refrendó en los 80′, cuando Luka Modric le pone un pase a tres dedos a Rodrygo y lo deja frente al meta inglés para que ponga el descuento y el suspenso de lo que pasaría con la llave. Así se fueron al alargue.
Fue entonces cuando apareció el héroe de la casa blanca: Benzema. Si bien solo había tenido el travesaño ya contado y parecía no estar en su noche, el artillero francés gana por la vía aérea y clava el balón al lado del poste izquierdo, para colocar el 2-3 y el 5-4 que le daba el paso a la semifinales.
El Chelsea intentó y estuvo muy cerca de anotar el cuarto gol, pero a esa altura la suerte ya estaba con el local. El resto es historia. Gran partido del campeón de Europa, que demostró por qué ganó la última Orejona, pero insuficiente para sacar al más ganador de la historia de la Champions, que hizo valer el 1-3 de Stamford Bridge. Ahora, los merengues esperan rival entre el Manchester City y el Atlético de Madrid, que se enfrentan mañana en la capital de España. La idea fue 1-0 para los ingleses.