El sufrido relato argentino del empate ante Paraguay, por la Copa América, deja en evidencia la distancia entre los trasandinos y su selección. La narración está plagada de reproches que tienen como destinatarios desde el técnico Lionel Scaloni hasta la máxima estrella del equipo, Lionel Messi, pasando por el arquero Franco Armani, quien antes de contenerle el penal a Derlis González era el blanco de las críticas más ácidas.
Los transandinos reclaman, y con razón, a un equipo que tiene figuras para mostrar un nivel futbolístico mucho más elevado en la Copa América, una competencia en cuyas últimas dos versiones han tenido que resignarse a perder finales ante Chile. Y por momentos, pierden la paciencia, como lo demuestra el relato de las incidencias del duelo ante los guaraníes.
El enojo llega a tanto que incluso llegan a proponer irrisorias fórmulas con la intención de avanzar de ronda en el certamen continental. "Hay que modificar el reglamento y que se clasifique el peor cuarto", dice parte de la narración, que se transforma en una dura crítica al nivel de la escuadra albiceleste.