Más allá de la época del año o del estado de forma, el encuentro entre los equipos más populares del país concita la atención, aguardando que las expectativas que se cifran en el Superclásico (exageradas, a veces) se puedan cumplir y satisfacer a la mayoría. La versión 196 del choque entre Universidad de Chile y Colo Colo no cumplió para nada. Un 0-0 desabrido fue el saldo final.
Los ingredientes para tener un duelo atrayente estaban sobre la mesa: un Estadio Nacional lleno, efervescencia en las tribunas, cancha en buen estado y jugadores de primera línea. Después de cinco años, azules y albos se enfrentaron en el coloso de Ñuñoa con público en las gradas, lo que evidentemente le daba otro tono al enfrentamiento.
En el equipo de Gustavo Álvarez había más claridad respecto a cómo plantear el partido, manteniendo la base, salvo por el ingreso de Luciano Pons por el ‘Chorri’ Palacios. En la vereda contraria, Jorge Almirón contaba con el retorno de Arturo Vidal y el debut de Mauricio Isla como novedades, teniendo un ojo puesto en el choque del martes ante Junior, por la Copa Libertadores. Además, con la presencia en la portería de Fernando De Paul, blanco de las pifias de los forofos azules (igual que el Huaso). Las modificaciones que introdujo el ex DT de Boca le cambiaron el diagrama al Cacique, no necesariamente para bien.
La U salió con las pilas al máximo. Apurando el juego y con ritmo alto, ejerció un dominio interesante en la primera parte del partido, complicando la salida y el posicionamiento en campo rival de los colocolinos. Ya sea por el planteo de Almirón como por el ímpetu de los laicos, el Cacique terminó cediendo el protagonismo del clásico durante, aproximadamente, media hora. Sin un centrodelantero como referencia, Marcos Bolados se fue al centro del ataque como una especie de 9, teniendo a Arturo Vidal y Carlos Palacios flotando de mitad hacia arriba.
Si bien estaba mostrando una mejor cara que su rival, la U no aprovechó esa ventana para generarle peligro real al área de De Paul. En los 10′, un zurdazo de Matías Sepúlveda fue despejado por el golero albo. Y no mucho más. Mientras Leandro Fernández no tenía su mejor jornada (poco preciso y efectivo con la pelota en los pies), Luciano Pons no entraba en sintonía porque no era suficientemente abastecido. La virtud del ariete es siendo definidor, y requiere de que le llegue el balón.
Esa intensidad de la U se desvaneció con el correr de los minutos, lo que le permitió a Colo Colo tomar aire y animarse, aunque tampoco inquietó a Gabriel Castellón. Lo más cercano fue un zurdazo de Vicente Pizarro, que se fue desviado. Un Cacique algo austero terminó el primer tiempo con el 53% de posesión, pero sin ningún remate en dirección a la portería.
El Rey no se cruzó con el Príncipe
Podía ser el Superclásico de la Generación Dorada. Hasta cuatro jugadores de la primera línea de la Roja bicampeona de América tenían la opción de coincidir en la cancha. Pero no se dio este escenario. Arturo Vidal, quien llegó al límite al partido, salió en el entretiempo. Y en la U ingresó Charles Aránguiz. Con la 29 en la espalda, el Príncipe tuvo su reestreno con la camiseta azul después de 11 años. Obviamente, generó la reacción inmediata de los hinchas. El ex Bayer Leverkusen sí compartió el campo con Marcelo Díaz y Mauricio Isla. Se notó su falta de ritmo.
Tratando de darle un viraje a un partido chato y de escasas claridades, los técnicos movieron el avispero. Álvarez se la jugó con el juvenil Ignacio Vásquez en lugar de un opaco Leandro Fernández. Almirón se puso más ofensivo e incluyó a Javier Correa, otro debutante. El punto es que, más allá de los movimientos, el encuentro no cambiaba su cara deslavada. Parece que ser pulcro en ofensiva estaba prohibido. Por lo mismo, el duelo era pesado de observar.
Si en la U, Marcelo Morales se liberó tras la salida de Isla y usó más la banda; en el lado de Colo Colo, la presencia de Lucas Cepeda le entregó más pasada por la izquierda. A cinco minutos del final, Castellón le sacó de gran manera un cabezazo a Falcón, en la ocasión más clara de la visita, gracias a la pelota detenida.
El Superclásico 196 acabó en un aciago 0-0, que dejó poco para la vista. Si bien la U rompió la racha de 23 años sin ganar en el Monumental en la primera rueda, no pudo terminar con otra este sábado: no supera a Colo Colo en el Nacional desde 2013. Sumará dos nombres a su plantilla. Se trata de los defensores Fabricio Formiliano (uruguayo, ex Montevideo Wanderers) y Bianneider Tamayo (venezolano, ex Caracas). En su lado, el elenco popular podrá focalizarse en un 100% en el choque de la Libertadores ante Junior.
El punto no deja conforme a nadie por lo apretada de la lucha arriba. ¿Será que se hacen expectativas demasiado elevadas con este partido, que una vez más decepciona desde lo futbolístico?
Ficha del partido
U. de Chile 0: G. Castellón; F. Hormazábal, F. Calderón, M. Zaldivia, M. Morales; I. Poblete (86′, L. Assadi), M. Díaz, M. Sepúlveda (46′, C. Aránguiz); M. Guerrero, L. Pons y L. Fernández (63′, I. Vásquez). DT: G. Álvarez.
Colo Colo 0: F. De Paul; O. Opazo, E. Amor, M. Falcón, E. Wiemberg; M. Isla (59′, C. Zavala), E. Pavez, V. Pizarro (46′, L. Gil); A. Vidal (46′, L. Cepeda), C. Palacios (77′, G. Castellani); y M. Bolados (59′, J. Correa). DT: J. Almirón.
Goles: No hubo.
Árbitro: C. Garay. Amonestó a Poblete, Calderón (U); Pizarro, Cepeda, Correa y el DT Almirón (CC).
Estadio Nacional. Asistieron 45 mil personas.
En cursiva, jugadores juveniles.