Con los Juegos Olímpicos de París 2024 oficialmente terminados tras una emotiva ceremonia, la polémica aún no se detiene. El Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) atendió el recurso de la Federación de Gimnasia de Rumania revalorar el puntaje de la final de la competencia de suelo.
Cinco días después de la prueba, la revisión le arrebata la medalla de bronce a la estadounidense Jordan Chiles y se la devuelve a Ana Barbosu, quien había caído al cuarto lugar después de que una apelación del equipo norteamericano elevara a su gimnasta desde el quinto puesto hasta el podio.
La rumana de 18 años había logrado instalarse en la tercera ubicación de la final de suelo, con una puntuación de 13.700, solo siendo superada por Rebeca Andrade (14.166) y Simone Biles (14.133). De hecho, estaba empatada en puntaje con su compatriota Sabrina Meneca-Voinea de solo 17 años, pero la superaba por tener una mejor ejecución.
Sin embargo, el reclamo del Team USA elevó a Chiles, que inicialmente presentaba 16.666 y pasó a 16.766, desplazando a las rumanas e instalándose en el podio. El desafío se centró en el Tour Jeté Full, uno de los elementos de la rutina que consideraban que no estaba debidamente calificado. La decisión provocó una de las imágenes de la cita de los cinco anillos. Desató el contraste entre la desazón de una y la felicidad de la otra.
Decisión del TAS y múltiples reacciones
El COI anunció la devolución de la medalla de bronce a Barbosu luego de la resolución del TAS. El organismo anuló el reclamo de la entrenadora estadounidense Cecile Landi, asegurando que no fue a tiempo. En detalle, indican que se realizó un minuto y cuatro segundos después, cuando el plazo estipulado es de solo un minuto. Es decir, estuvo cuatro segundos fuera del margen de las regulaciones de la Federación Internacional de Gimnasia (FIG). Ahora, el Comité y la FIG trabajan para realizar una ceremonia de premiación para la gimnasta rumana.
En tanto, el equipo estadounidense aseguró que apelará a la decisión. “Creemos con firmeza que Jordan se ganó el bronce con justicia, y que se cometieron errores graves en la puntuación inicial por parte de la FIG y en el subsiguiente proceso de apelación del TAS”, dijo el Comité Olímpico y Paraolímpico de Estados Unidos. “Durante todo el proceso de apelación, Jordan ha sido objeto de ataques constantes, absolutamente infundados y extremadamente hirientes en las redes sociales. Ningún deportista debería ser objeto de ese trato, condenamos los ataques y a quienes participan, apoyan o instigan en ellos”, añadieron.
La situación ha provocado reacciones de todos lados. Por ejemplo, la legendaria Nadia Comaneci expresó su indignación: “No puedo creer que juguemos de esta manera con la salud mental y las emociones de las deportistas. Protejámosles”, indicó.
Chiles, en tanto, respondió con dos publicaciones en sus redes sociales. Primero, posteó cuatro emojis de corazones rotos. Después, señaló: “Me estoy tomando este tiempo y me estoy alejando de las redes sociales por mi salud mental, gracias”.
Por su parte, Barbosu también pidió que no se realicen ataques contra las gimnastas: “Solo quiero que todos sean justos, no queremos empezar a criticar a otros deportistas de ninguna nacionalidad. Nosotros, como deportistas, no merecemos algo así, solo queremos rendir al máximo y ser recompensados en función de nuestro rendimiento. Los problemas están en los jueces, en sus cálculos y decisiones”.
La Federación Rumana de Gimnasia solicitó, como resolución salomónica, que se entreguen tres medallas de bronce: para Barbosu, Chiles y Meneca-Voinea. Mientras que la portavoz de la FIG, Meike Behrensen, indicó que “la reasignación de medallas es responsabilidad del COI”.