La U venció a Everton de manera épica. El gol de Lucas Assadi en el último minuto del partido provocó una efusiva celebración en la cancha del Sausalito y eso no le gustó a la hinchada local.
Los seguidores del equipo oro y cielo estaban dolidos por cómo se les había ido el partido, ya que tuvieron varias chances para ganarlo, pero la impericia de sus delanteros y las buenas atajadas de Gabriel Castellón impidieron que los locales estiraran las cifras.
Por lo mismo, no faltó el asistente que descargó su frustración con los jugadores de la oncena capitalina y esto fue repelido por Matías Zaldivia, tal como se vio en un video de La Voz Azul. El defensa de los actuales punteros del Campeonato Nacional se enfrascó en una discusión con el fanático. En pleno momento de insultos mutuos intervino Diego Oyarzún, defensor de la escuadra anfitriona.
El zaguero de los dueños de casa encaró al azul y le pidió que dejara tranquila a la persona que estaba en la grada. Zaldivia se alteró y le pidió que fuera a decirle lo mismo a su interlocutor.
Luego de varios insultos, el viñamarino le pide a Zaldivia que vaya a festejar tranquillo y el universitario le pregunta que haría él si lo insultaran con garabatos de alto calibre. Los observadores de la situación intentaron separarlos y calmar los ánimos, para que el conflicto no escalara.
“Diego, tú no eres como él” se alcanza a escuchar la voz de una mujer vinculada al club local, que intentaba que Oyarzún no se alterara más de lo que estaba Todo se diluyó cuando Zaldivia se fue al vestuario y el evertoniano se retiró del lugar.
La derrota en la última fecha de la rueda inicial, caló hondo en los ruleteros. No solo porque tuvieron varias chances para quedarse con los tres puntos o por el agónico tanto de Assadi, sino más bien porque terminan la primera parte lejos del objetivo que tienen para este año: clasificarse a un torneo internacional.
La escuadra de la Ciudad Jardín quedó octava con 21 unidades, a tres de Deportes Iquique, el último que ingresaría a la Copa Sudamericana. Igualmente, queda todo un semestre para cambiar la suerte.