Brasil tuvo un planteamiento pragmático, donde esperó a la Roja y trató de salir en velocidad. La defensa fue la base de su juego, donde el meta fue la pieza clave para dejar el arco en cero.
Weverton: Fue la gran figura de Brasil. Tuvo dos tapadas notables a los 30′, primero a Vidal y después un cabezazo a Vargas. Después repitió contra el King.
Danilo: No pudo proyectarse. Estuvo demasiado pendiente de las subidas de Mena. Trató de meterse más en el segundo tiempo, pero no gravitó.
Eder Militao: El más bajo de los dos centrales. Cometió una falta evidente a Vargas, al borde del área, que pudo significar la apertura del marcador.
Marquinhos: Bien en el juego aéreo, defensivo y ofensivo. El primer agente de salida de su equipo. Ordenó y sacó al equipo desde atrás.
Alex Sandro: Tuvo demasiados problemas con las subidas de Isla. Tuvo un cruce notable en área chica para evitar el gol de Aránguiz.
Casemiro: El mejor de los volantes brasileños. Aportó salida y equilibrio. Bien en las coberturas y en la tenencia de la pelota. Manejó los tiempos.
Bruno Guimaraes: Intentó poner equilibrio en el medio, pero no pudo frente al ordenado trabajo de la línea de volantes chilenos. Salió en el entretiempo con amarilla.
Vinicius Junior: Se perdió en el esquema de Tite. Jugó pegado a la banda izquierda, pero no defendió y tampoco se proyectó. Intrascendente.
Lucas Paquetá: Nominalmente, debía ser el enganche de Brasil, pero no estuco preciso. Debió tirarse atrás para defender y perdió protagonismo.
Neymar: Fue bien contenido por el equipo chileno. Se frustró a ratos y no pudo tomar la iniciativa de su equipo. Obligó al rebote de Bravo en el gol.
Gabigol: Protagonizó un contragolpe antes del minuto, pero naufragó frente a la última línea chilena. No tuvo remates al arco ni pelotas en ventaja.
Gerson: Ingresó para dar mayo presencia en el medio y lo logró. Se metió entre los centrales y cortó los circuitos en último pase de los chilenos.
Everton Ribeiro: Jugó en el segundo tiempo para aumentar el volumen ofensivo del equipo de Tite. Remató sin vacilaciones para marcar el gol.
Matheus Cunha: Ingresó para dar velocidad al contragolpe brasileño, pero tuvo pocas opciones de tocar la pelota.