La mezcla entre juveniles y suplentes que presentó Colo Colo frente a Ñublense pagó las consecuencias de la irresponsabilidad en el festejo por el triunfo en el Superclásico. En Chillán, los Diablos Rojos marcaron la diferencia entre jugadores consolidados y otros que recién buscan hacer sus primeras armas en el profesionalismo y que ni siquiera han completado sus procesos formativos.
En el local, en cambio, se limitaron a aprovechar las concesiones que ofreció el improvisado equipo que dispuso Gustavo Quinteros para quedarse con una victoria que, igualmente, recibirá la calificación de histórica en los registros del club chillanejo.
Felipe Fritz
Llegó a Colo Colo como refuerzo y aún no ha sido capaz de convencer a Gustavo Quinteros. No había tenido mayores chances para hacerlo. Ahora que dispuso una, claramente no la aprovechó. Su banda se transformó en un pasadizo, aunque como atenuante se puede decir que el puesto de lateral no es su especialidad y que tuvo que cumplir la función ante la emergencia.
Juan Carlos Gaete:
El delantero fue otro de los fichajes de Colo Colo para la actual campaña. Como Fritz, tampoco se ha ganado un puesto en la escuadra estelar. Eso sí, a diferencia de su compañero, al menos en el primer tiempo mostró las cualidades que llevaron a los albos a volver a reclutarlo desde Cobresal. Marcó un gol que ilusionó al Cacique con un desenlace distinto.
Felipe Campos
Otro de los jugadores albos que dilapidó una chance para convencer a Quinteros. Incapaz de darle solidez a la última línea, desechó una oportunidad para mostrarse en una plaza que tiene varios postulantes que están por encima suyo: Zaldivia, Falcón y, desde ahora, Emiliano Amor.
Luciano Arriagada
Se esperaba más del centrodelantero, sobre todo después de su irrupción en la temporada pasada, cuando le anotó a Coquimbo e ilusionó a los fanáticos del Cacique. Frente a los Diablos Rojos, en cambio, sucumbió ante la marca de los defensores centrales del equipo de Jaime García y fue incapaz de unirse a los volantes para buscar otras opciones de participar en el juego.
Carlo Villanueva
De lo mejor que mostraron los albos en el sur. Sobre todo en el primer tiempo, el mediocampista mostró el talento y la visión para encontrarse permanentemente con Gaete. De esa sociedad salió el gol albo y las llegadas de mayor riesgo. Después, terminó diluyéndose ante el mejor rendimiento que mostró el cuadro local.
Joan Cruz
Otro jugador para ponerle atención. Como Villanueva, desarrolló un buen primer tiempo, aunque en la segunda fracción pagó caro el desgaste del mayor nivel competitivo y el que generaba la barrosa cancha del estadio Nelson Oyarzún. Técnico y atrevido, es uno de los jugadores que genera mayores expectativas en Macul.
Julio Fierro
Partido ingrato para el guardameta, quien pudo tener una mejor reacción en el primer gol de Maximiliano Quinteros. Después, realizó algunas tapadas que evitaron una caída que pudo ser más abultada y el resto de los goles no pasó por su responsabilidad. Debe trabajar, eso sí, el juego con los pies, pues cada vez que sus compañeros retrasaron el balón se vio incómodo y complicado.
Maximiliano Quinteros
El delantero de Ñublense fue pura contundencia y lo graficó en el doblete que aportó para el triunfo de la escuadra de Jaime García. Afrontó el encuentro con seriedad y respondió plenamente a la responsabilidad de transformarse en el referente de área de los Diablos Rojos.
Nicolás Guerra
El atacante formado en Universidad de Chile se reencuentra con su esencia en el sur. Frente a los albos, marcó su tercer gol en la temporada. Se mostró activo y dinámico y constituyó un buen complemento para el trabajo de Quinteros en la ofensiva de la escuadra chillaneja.