El Mundial Femenino de Francia aspira a condiciones más equitativas en relación al fútbol masculino. Sin embargo, todavía hay cosas que ajustar.
Si bien entre los organizadores hay satisfacción por incluir por primera vez al VAR en esta cita, lo cierto es que la participación de las árbitras frente a los monitores está reducida a cero, ya que los 15 jueces designados para la asistencia tecnológica son hombres, quienes se encuentran en una sala de video en el Centro Internacional de Radio y Televisión (CIRTV) de París, desde donde se transmiten por fibra óptica las imágenes captadas en los nueve estadios mundialistas, comunicándose con la árbitra de turno, mediante un sofisticado sistema de radio sobre fibra.
De hecho, el sábado, la jueza chilena Belén Carvajal fue protagonista al ser asistida por las cámaras para sancionar un penal favorable a España. En dicho encuentro, el argentino Mauro Vigliano estuvo a cargo del VAR y fue el designado para asistirla en la polémica jugada.
"Para ser árbitras VAR, necesitas una experiencia de mucho tiempo y ellas no la han tenido y por eso los árbitros VAR van a ser árbitros de experiencia, que ya estuvieron en el Mundial de Rusia, pero sí las que están en el campo han recibido la información suficiente como para saber cómo actuar con las nuevas tecnologías", comentó Marisa Villa, observadora UEFA y FIFA en tierras galas, al diario Marca.
Enrique Osses, presidente de la Comisión de Árbitros de la ANFP, describe la realidad nacional y las directrices a seguir. "En Chile, vamos a ir paso a paso, dependiendo de sus capacidades. En principio, en esta capacitación que estamos iniciando, no se tiene contemplado mujeres", explica. Aunque aclara que hay disposición a integrarlas: "Estamos abiertos a capacitarlas".