La naranja está en el aire. La temporada 2019-20 del básquetbol chileno comienza este viernes, cuando se dispute la Supercopa de la Liga Nacional, un inédito trofeo que reúne a los últimos dos campeones de la LNB. No es un partido cualquiera, Valdivia y Las Ánimas se enfrentan a partir de las 21.00 horas, en el Coliseo Antonio Azurmendy, la catedral del baloncesto chileno.
En el clásico del Calle Calle se definirá al primer campeón del año. El CDV, vigente monarca de la LNB, se medirá ante los fantasmas, campeones anteriores y actuales ganadores de la Copa Chile, lo que les dio el pase a disputar el cetro al primer supercampeón de Chile. Valdivia, sede de los últimos partidos que jugó la selección nacional,se divide por el encuentro.
El equipo más popular de la capital de Los Ríos es el homónimo de la ciudad, el Club Deportes Valdivia, cuyo origen se remonta a 1986, con la unión de equipos de la zona, y desde que se creó la Dimayor, posterior Liga Nacional, ha ganado tres títulos nacionales. En frente, Las Ánimas, surgido desde el barrio nortino del mismo nombre. Viven su época dorada desde su creación como club en 1942, pues ganaron la Liga e hicieron historia en la Liga de Las Américas, al convertirse en el primer club chileno que avanzó al cuadrangular semifinal del torneo. Toda una hazaña.
Valdivia y Las Ánimas darán el salto inicial a la temporada. Los fantasmas, que renovaron como coach a Lucas Zurita, ficharon a Claudio Naranjo, que llega directamente desde el CDV y conoce cómo se vive el básquet en la ciudad. "Es un clásico, una rivalidad que ha ido aumentando popularmente en el tiempo, pero la gente sabe que son dos equipos de la ciudad, hay cierto respeto por eso. Será un partido áspero, pero no pasa más allá del momento en la cancha", dice Calulo.
Por parte del CDV, que tendrá por otra temporada al técnico Juan Manuel Córdoba, Gerardo Isla, capitán del equipo, comparte las palabras de su rival. "Es un clásico importante, con un equipo que nos ha complicado bastante en el último tiempo. Es un partido que tiene folclore extra por estar en la ciudad más basquetbolizada del país y la expectativa es alta", dice el también seleccionado nacional.
Ambos exponentes de los cestos chilenos valoran el aporte de Valdivia. ¿Es la capital del básquetbol chileno? "De todas maneras", dice Isla. Y agrega: "Se han podido mantener dos clubes profesionales. Al público le gusta y no solo cuando los resultados acompañan. Se respira el básquet más que otros deportes, la hinchada es prestada al fútbol y eso en otros lados no pasa".
"En los últimos años Valdivia ha estado arriba con los dos equipos, que son los últimos campeones. En esta ciudad es donde mejor se vive el básquet. En el centro, en los colegios se habla del deporte y es bueno para los jugadores, porque la gente sabe qué pasa con sus equipos", complementa Naranjo.
Dos equipos que se reforzaron para la temporada. El CDV volvió a confiar en el base argentino Nicolás Ferreyra, además de sumar a su compatriota Ignacio Alessio y al estadounidense Rashad Madden. En tanto, los fantasmas mantuvieron la base que ganó la Liga Saesa, además de contratar a Naranjo, y a Dane Johnson, Kristian Klarkson y Dareial Franklin como fichas extranjeras. Un buen espectáculo, una gran sede y un clásico del Calle Calle, digno escenario para la primera Supercopa.