Una espera de 33 años se acabó. El sur de Italia se revoluciona porque tiene al mejor del Calcio en su territorio. El Napoli se convirtió en el flamante campeón de la Serie A 2022-2023, el premio a ser el más regular de la temporada y al que mejor jugó en el fútbol transalpino. El empate 1-1 con el Udinese, como visitante (aunque parecía local, por la nutrida presencia de sus hinchas en las tribunas), selló el Scudetto para los napolitanos.
El festejo se hizo esperar, porque el equipo que dirige Luciano Spalletti pudo haberse consagrado el domingo pasado, si derrotaba a la Salernitana, en casa. El ambiente en la ciudad estaba elaborado para la fiesta, sin embargo el empate con la escuadra granata postergó unos días la consagración. Por la diferencia que construyó con sus escoltas, era cosa de tiempo el título del elenco ‘azul cielo’. Pero la ansiedad de su apasionada fanaticada, que siguió el duelo de este jueves en pantalla gigante en el Estadio Diego Armando Maradona (ex San Paolo), quería cuanto antes ese trofeo tan ansiado.
Ante el Udinese, requería sólo de un empate. Sin embargo, el partido se le complicó al Napoli porque el exclub de Alexis Sánchez se puso en ventaja a los 13 minutos, con un golazo de Sandi Lovric. La derrota postergaba, nuevamente, la consagración de los Partenopeos.
En el segundo tiempo, la escuadra de Spalletti, superando la fatiga de una campaña exigente, llegó al gol que le dio el título de la liga. En el minuto 52, el nigeriano Victor Oshimen convierte el 1-1, en una de las anotaciones más importantes de la historia de la institución. Porque gracias al tanto del exjugador del Lille, se acabó una larga sequía.
En las calles de la ciudad ya se sentían campeones. Desde la semana pasada que los tifosi dejaron de lado cualquier cábala y decoraron los sitios con carteles, pancartas y banderas alusivas al equipo. Se aguardaba con ansias poner fin a una espera eterna para una ciudad que vive el fútbol con una pasión desbordante. Inevitablemente, la asociación con Diego Maradona está a la mano. El de ahora es el primer título de liga del Napoli sin la presencia del ídolo argentino, quien fue fundamental para entregarle los únicos dos Scudettos que tenía el club (hasta ahora).
El primero fue en el curso 1986-1987, cuando lograron el doblete (liga y Copa Italia). El segundo fue en el 1989-1990, cuando el Pelusa y el brasileño Careca fueron los estandartes de una campaña histórica. Además, con el Diego, el Napoli consiguió el único título continental que albergan sus vitrinas: la Copa UEFA 1988-1989. Pasaron más de 12 mil días para que la tienda napolitana volviera a ser el campeón del Calcio.
¿Es sorpresivo el título napolitano? Quizás. En las últimas temporadas fue un animador constante en la liga. Eso sí, no cuenta con el poderío de otros competidores como Juventus, Inter y Milan. La directiva encabezada por el polémico Aurelio De Laurentiis apostó por un equipo sin grandes estrellas, pero con un estilo propio. Tanto el nigeriano Oshimen como el georgiano Khvicha Kvararskhelia fueron los nombres propios de una campaña extraordinaria.
El Azzurri salió campeón con cinco fechas de anticipación (el último había sido la Juventus, en 2019) y tiene una ventaja de 16 puntos sobre su escolta, la Lazio. Por ejemplo, le lleva 20 puntos al Inter, que está cuarto y cierra la zona de clasificación para la Champions League.
Después de los nueve títulos consecutivos que ganó la Juventus, entre 2012 y 2020, los tres últimos campeones del fútbol italiano son distintos. Primero fue el Inter (20-21), luego el Milan (21-22) y ahora le toca al Napoli (22-23).