Paulo Díaz fue el héroe de River Plate en su visita a Junior por la Copa Libertadores. El cuadro argentino estaba perdiendo por la cuenta mínima, no obstante, un gol del defensor chileno en los descuentos terminó firmando el 1-1 definitivo, en un duelo que se disputó pese a estar cerca de suspenderse, producto del estallido social en Colombia.

El zaguero formado futbolísticamente en Palestino aprovechó su gran juego aéreo para decretar la paridad. En los 90′+2, le ganó la marca a uno de sus rivales en un tiro de esquina que fue ejecutado desde el sector izquierdo y, con un impecable testazo, puso el empate.

Los colombianos no lograron cuidar su ventaja hasta el término del cotejo para quedarse con la victoria. En los 20′, Miguel Borja se filtró entre los defensores del equipo transandino, para luego derrotar, con un toque sutil, al meta Franco Armani y establecer el 1-0, que, al final, su club no consiguió mantener. El responsable de aquello fue Díaz, quien sigue sumando buenas actuaciones con la camiseta de River.

Los transandinos marchan en la segunda posición del Grupo D del torneo, con seis unidades. Dos menos que el líder, Fluminense. El próximo partido del conjunto de Buenos Aires en la Libertadores será frente a Independiente de Santa Fe, el miércoles 19 de mayo, desde las 20.00 horas. Antes, eso sí, deberá medirse con Boca Juniors, en un nuevo clásico. Será el sábado, desde las 16.30.

Las protestas en el país cafetero volvieron a salpicar al certamen continental. El Millionario, de hecho, no pudo hacer el trabajo precompetitivo debido a los gases lacrimógenos que fueron utilizados por la policía local para dispersar a los protestantes que estaban en las afueras del estadio. En la previa, el compromiso estuvo a punto de suspenderse por la convocatoria realizada bajo la consigna de “El partido no se juega”, sin embargo, se disputó de todas formas.

El juez pitó el inicio del encuentro, mientras en las inmediaciones seguían los enfrentamientos. Y, cuando el cronómetro marcó los 23′, el encuentro se detuvo, a causa de los gases que afectaron la visión de los protagonistas. Marcelo Gallardo fue uno de los más complicados. El DT fue captado por las cámaras cubriéndose los ojos, al igual que varios de los futbolistas.

“No fue normal venir a jugar un partido en una situación inestable que está viviendo el pueblo colombiano. Se jugó con gases lacrimógenos y escuchando detonaciones. El resultado termina siendo anecdótico, uno no se va contento bajo las circunstancia en las que se jugó hoy”, declaró el técnico tras el encuentro.