Uno de los deportes que siempre genera mayor interés en el público en los distintos Juegos Olímpicos es la gimnasia, y París 2024 no fue la excepción. Este martes, por ejemplo, los ojos del mundo se centraron en Simone Biles, quien conquistó el oro para Estados Unidos en la competencia por equipos.
En esta actividad, uno de los aspectos más importantes para rendir adecuadamente es la alimentación. En este aspecto, parece no haber recetas: unos prefieren la rigurosidad, mientras que otros se dejan llevar por sus gustos personales. Así lo reconocieron varios atletas previo a la competencia en la capital francesa.
Dietas adecuadas a las necesidades
El británico Jake Jarman, quien ya ha visto acción en París 2024, confiesa que su alimentación está hecha a la medida, en función de sus necesidades deportivas. Una de las semillas que más consume en la chía, gran fuente de minerales, incluyendo calcio, magnesio y fósforo.
“Hidratación, consumir proteína después del entrenamiento, que es muy bueno para la recuperación muscular, lo más importante, y los carbohidratos para la energía de liberación lenta”, dijo hace unos meses en conversación con Olympics.com. “Un día como hoy, en el que tengo que entrenar y competir, es un día largo y de mucha intensidad, así que los carbohidratos son muy importantes”, agregó.
En esta misma línea, la canadiense Ellie Black también trata de ajustarse a sus necesidades, siempre de una forma sana. Su caso es bastante particular, puesto que ella es chef: “Hacer una buena comida casera es una de mis actividades favoritas”, reconoce.
La deportista de 28 años dice que cocinar le ayuda a olvidar la intensidad de la gimnasia: “Me encanta saber lo que como, y me encanta cocinar, tanto para mí como para mi familia. ¡Lo siento terapéutico!”.
“Dos huevos te aportan 13 gramos de proteína, lo cual me ayuda para obtener la energía que necesito, y es algo que puedes tener bajo control. Incluso si estás viajando, o estás en una competición, puedes seguir tus mismas rutinas, tus comidas y tu recuperación”, declaró.
Los gustos también están permitidos
Por su parte, analizando a Simone Biles, mezcla una alimentación sana, pero realista. Esto porque promueve el equilibrio, en donde la proteína, la fibra, las frutas y las verduras son importantes, pero también tienen espacio los gustos personales.
En ese sentido, la ganadora de ocho medallas olímpicas (cinco de oro), es fanática de la bollería, especialmente los rollos de canela. “Como aquello con lo que me siento bien”, reconoció en una entrevista en 2020. Incluso en algunas oportunidades se le vio con un hot dog.
Otra atleta que sigue un pensamiento parecido es la británica Alice Kinsella. La nacida en Basildon dice que no es rigurosa con la alimentación: “No llevó una dieta estricta, no soy esa clase de persona. Simplemente hago lo que siento que es mejor para mí”.
“Me gusta ir al McDonald’s de vez en cuando. Así que, cuando llego a casa, voy directo”, admite.
