La Roja está contra las cuerdas. Este martes enfrentará a Bolivia y no tiene margen de error. El duelo se anticipa como un partido bisagra, clave para volver a adentrarse en la pelea por alcanzar algún boleto para el Mundial de 2026.
Ricardo Gareca no lo pasa bien. Asoman las dudas en torno a su proceso. Ya son cuatro duelos sin vencer (ni anotar), todos encuentros oficiales. Cualquier cosa que no sea ganar ante los altiplánicos, prácticamente hipotecará las opciones de la Selección.
El inicio del Tigre fue ilusionante, pues se consiguieron dos goleadas ante Albania y Paraguay (ambas por 3-0), y una trabajada derrota ante Francia, la subcampeona del mundo (3-2). Pese al poco tiempo de trabajo, los resultados generaron expectación para la Copa América. No obstante, la ilusión se desmoronó tras en un certamen donde no se pasó fase de grupos. Tampoco se ganó ni se anotó. El golpe se profundizó luego de la derrota ante Argentina.
“Hay que levantarse. Las Eliminatorias son así. Es una historia que conozco. Cada partido es una historia diferencia. Hay lugar para el análisis, para corregir, pero hay que dejar atrás. El primer día duele. Creo que tenemos los argumentos para levantarnos. Ojalá que la gente nos apoye, que no deje de confiar en nosotros, que estamos en condiciones de levantarnos”, señaló Gareca después de perder con la Albiceleste.
Una situación similar
La selección chilena está en una situación complicada y el Tigre lo sabe. Sin embargo, el argentino no lo reniega. Es una situación que conoce.
Gareca asumió en marzo de 2015 el mando de la selección de Perú. Su historia con la albirroja lo terminó ubicando como uno de los técnicos más queridos en el pueblo peruano. Sin embargo, su inicio también fue complicado.
“El proceso ya arrancó. Estoy en un proceso en que hay que encontrar resultados rápidos. Las Eliminatorias son muy cambiantes. Me tocó vivir dos procesos en que arrancamos muy atrás. Es muy difícil. El dolor lo tengo, pero en cuatro o cinco días lo podemos transformar. Bolivia es un rival difícil, pero las Eliminatorias entregan oportunidades a todos. Vamos a poner toda la energía para poder recuperarnos”, aseguró tras el duelo con la Albiceleste.
“Hay un lote en la mitad de tabla en que vamos a estar todos en la lucha. Es lo que quiero transmitirle a la gente. En eso estoy convencido. Tengo la experiencia de poder saber estas clase de situaciones donde las historias cambian constantemente. A los jugadores les transmití que no quiero lamentos. Hay que respetar los opiniones y las críticas, pero no quiero lamentos. No hay tiempo para eso”, enfatizó, continuando con su análisis.
Pésimo inicio con Perú
El 31 de marzo de 2015 hizo su estreno con Perú, cayendo por la cuenta mínima en un amistoso ante Venezuela. Era la previa de la Copa América 2015, donde perdió en la recordada semifinal ante Chile y logró quedarse con el tercer puesto. No obstante, sería un espejismo en su magro inicio.
En la primera jornada de Eliminatorias visitaron a Colombia, en un duelo que acabaría 2-0 a favor de los cafetaleros. En la segunda caería ante la Roja como local (3-4). De ese entonces en adelante, Gareca completó el peor arranque en la historia. Ganó un duelo y empató otro en las primeras siete fechas. Es decir, obtuvo cuatro puntos de 21 posibles, instalándose en el fondo de la tabla de posiciones, solo por delante de Bolivia y Venezuela.
Luego de la derrota con Chile, el Tigre le dio un remezón al camarín. Decidió dejar fuera a tres referentes del equipo como Claudio Pizarro, Juan Manuel Vargas y Carlos Zambrano, entre otros. Ninguno asistió a la Copa América Centenario de 2016. Jefferson Farfán, por ejemplo, tampoco fue nominado pero por lesión.
“Llegó Gareca y el profesor limpió a varios, yo fui el primero. Hasta lágrimas tiré porque no me llevó a la Copa América de Estados Unidos”, reconoció la Foquita en su programa Enfocados, en marzo de este año.
“Jugador que no estaba al 100% no iba, así sea Farfán, Guerrero o Pizarro”, indicó. “Antes, por un empate celebrábamos, pero con Gareca todo eso cambió. Ahora íbamos a Ecuador (o cualquier otro lado) a ganar, cuando antes ni queríamos ser convocados. Esa mentalidad nos ayudó muchísimo para clasificar al Mundial”, añadió.
Es una situación similar, que recuerda lo vivido en Chile. El Tigre no consideró a Arturo Vidal y Gary Medel, dos de los máximos referentes de Generación Dorada y de la historia de la Selección. De hecho, justamente el Rey hizo eco por sus profundas críticas tras la derrota ante Argentina. “¡Este huevón no ve la Libertadores! Parece que sólo ve los partidos del fútbol argentino”, empezó diciendo el jugador de Colo Colo. “¡Tenís que hacer tres cambios ahora ya! Tienen que calmarse en la cancha. (Gareca) Tiene que dejar de inventar. Si el fútbol es muy sencillo”, añadió. “¡Lo único que falta es que haga seis cambios!”, remató sarcásticamente.
Consolidación del proceso
Gareca privilegió el nivel y dejó fuera a algunos futbolistas que habían protagonizado actos de indisciplina. De ahí en adelante, todo cambió. La apuesta terminó dando resultados y desde la séptima fecha en adelante, Perú solo perdió dos encuentros (Chile en Santiago y contra Brasil). Además, se mantuvieron invictos en las últimas seis jornadas, sumando 12 de 18 unidades.
Un punto de inflexión también terminó siendo el ‘Caso Cabrera’. El TAS falló a favor de los albirrojos y la Roja luego de que Bolivia (séptima y octava fecha) alineara indebidamente al paraguayo Nelson Cabrera, que aún no cumplía el plazo estipulado que la FIFA indica que debe vivir un jugador en un país antes de ser nacionalizado. Perú había perdido y Chile empatado, pero terminaron sumando tres unidades.
Eso, sumado a la serie de buenos resultados, llevó a que los incaicos llegaran a la última jornada en la quinta ubicación. Mientras empataban con Colombia y mientras la selección nacional caía ante Brasil, vino el recordado ‘Pacto de Lima’. Ambos elencos jugaron pasivamente los últimos minutos del duelo, dejando a los cafetaleros clasificados y a Perú en zona de repechaje, donde terminarían venciendo a Nueva Zelanda y clasificando al Mundial después de 36 años de ausencia.
Después vendrían las Copas Américas de 2019 y 2021. En la primera alcanzó la final, pero cayó con Brasil, mientras en la segunda quedaron cuartos, sumando su tercera semifinal continental. En tanto, se quedaron a las puertas de Qatar 2022 tras perder contra Australia en penales. Este hecho significaría el fin al vínculo entre Gareca y Perú tras siete años siendo su entrenador.