Solo se habían jugado cinco minutos del clásico universitario. Con un resistido penal por mano de Felipe Seymour, la Universidad Católica abría la cuenta con un tanto de Fernando Zampedri. Mientras los cruzados celebraban y los azules seguían reclamando, ocurrió lo peor.
Fuegos artificiales y bombas de estruendo cayeron a solo unos metros del portero azul Martín Parra, quien cayó al césped. Los futbolistas de la U de inmediato corrieron en su auxilio, ante la preocupación del cuerpo técnico de Sebastián Miranda.
El meta debió ser retirado en camilla del terreno de juego. Transcurridos los minutos, se supo que el meta de 22 años tuvo que salir directamente desde los camarines del Estadio Elías Figueroa en ambulancia a la Clínica Los Andes en Santiago, según contó TNT Sports. Preliminarmente, Parra fue transportado trauma acústico fuerte.
Suspendido oficialmente
Tras el grave incidente, el árbitro del clásico universitario, Felipe González, decidió enviar a los jugadores a los vestuarios, ante la incredulidad de los espectadores en el recinto de Valparaíso. Minutos más tarde, de forma oficial, se comunicó la suspensión del duelo entre Universidad Católica y Universidad de Chile. Ahora serán los organismos pertinentes los que definan las sanciones por lo sucedido y a un posible ganador del encuentro.
“En el momento en que se reanudó el partido, sentimos unas bengalas y visualizamos que (Martín Parra) estaba en el suelo”, comenzó relatando Felipe González ya en camarines. El juez contó también que evaluaron con los médicos de la U la situación en que estaba el meta, y que en base a eso tomaron una determinación: “El jugador estaba en el suelo, muy confundido, no hablaba, no estaba con sus cinco sentidos operativos, por lo tanto tomamos la decision de suspender definitivamente dado que no estaban las garantías. La decision se tomó en cancha en base al diagnostico que se le hizo”.