El presidente de la Federación Colombiana de Fútbol (FCF) Ramón Jesurún y su hijo Ramón Jamil Jesurún fueron arrestados en Estados Unidos en medio de los incidentes que se produjeron en la previa de la final de la Copa América en Miami según ha reportado la prensa colombiana.
Según resalta Publimetro, el el dirigente apareció en un video en el que se le ve forcejeando con algunas personas mientras uno de sus acompañantes y otros familiares intentaban sacarlo del lugar, tal como compartió Fox Sports en su versión de México.
En la misma publicación señalan que el dirigente no fue visto dentro del área en la que se encontraban las autoridades del fútbol, así como tampoco se presentó para la ceremonia de entrega de medallas, lo que se explica con la detención.
Ramón Jesurún estuvo acompañado en la Copa América por sus hijos, yernos y nietos, en una comitiva cercana a las 12 personas.
Los incidentes
El caos que se generó en la entrada superó las medidas de seguridad que se habían establecido para la final entre Argentina y Colombia. Esto significó un retraso importante en el inicio de la competencia y le dio a los jugadores un momento de incertidumbre extra, pues estos estaban pendientes de lo que pasaba al exterior por el contacto que mantenían con sus familiares.
De todas manertas, la cuenta oficial de X del Hard Rock Stadium publicó un comunicado en el que aseguraba que la seguridad no era la base del problema.
“Los preparativos incluyeron un aumento en el número de agentes de policía y de seguridad disponibles, con más del doble de personal que en un evento típico en un estadio con capacidad máxima”, señaló un vocero en el texto
“Se cerraron y reabrieron varias puertas del estadio estratégicamente en un intento de permitir que los visitantes con boletos ingresaran de manera segura y controlada. Los fanáticos continuaron participando en conductas ilegales: pelearon con agentes de policía, derribaron muros y barricadas y destrozaron el estadio, causando daños significativos a la propiedad”, expuso el comunicado.
Por su parte, la Conmebol expuso un insólito comunicado donde dijeron muy poco. “Informamos que las personas que no cuentan con tickets no podrán ingresar al estadio. Solo aquellos que tengan tickets adquiridos podrán hacer el ingreso una vez que vuelvan a ser habilitados los accesos”, sentenciaron en una escueta misiva.
Apertura de puertas
Los registros dejaron de todo. Más allá de los saltos de las rejas, una de las fotografías más impactantes fue aquella que mostraba a un grupo que intentaba ingresar al estadio a través de los tubos de ventilación. Fue tal el descontrol, que a las 20:20 se decidió la apertura definitiva de las puertas del Hard Rock Stadium. Pese a los intentos por evitarlo, la organización decidió rendirse antes las evasiones a los controles.
Ni siquiera los familiares de los jugadores se salvaron de la violencia. “Tuvo que salir Alexis para podernos hacer entrar, porque estaba preocupado. Yo pensé que no se iba a jugar el partido. Si los jugadores estaban preocupados de resolver esto, era improbable que un partido se lleve a cabo. Fue inhumano lo que pasó. Estamos bien, siempre Alexis nos llamó, pero él dijo que se iba a quedar en la puerta hasta que entremos. Lo dejamos tranquilo para que pueda jugar”, relató Silvina Riela, la madre del volante transandino Mac Allister.