El futuro de la final de la Copa Libertadores entre River Plate y Boca Juniors corre por dos carriles. Por un lado, el de la reunión que sostendrán en Luque los presidentes de ambos clubes, Rodolfo D'Onofrio y Daniel Angelici, con el timonel de la Conmebol, Alejandro Domínguez, una cita a la que también asistirá el presidente de la AFA, Claudio Tapia. Y por otro está el procedimiento que abrió la Unidad Disciplinaria de la Conmebol, después de la denuncia que presentó el club xeneize por lo que considera insuficiencias en el operativo de seguridad relativo al partido de vuelta de la definición.
En este último plano, el tribunal de primera instancia abrió el procedimiento disciplinario en contra del club de la banda sangre. "La Confederación Sudamericana de Fútbol -CONMEBOL- informa que la Unidad Disciplinaria ha abierto un procedimiento disciplinario de oficio contra el Club Atlético River Plate por incidentes ocurridos el día 24 de noviembre del 2018, fecha en que estaba programado el partido final de vuelta de CONMEBOL Libertadores 2018", consigna el comunicado expedido por la entidad.
El instrumento consigna que River tiene 24 horas a partir de la notificación para formular sus alegatos y presentar las pruebas que estime convenientes para su defensa.