Este jueves 6 de agosto debutaba Esteban Bustos en sus segundos Juegos Olímpicos, tras Londres 2012. Pero el campeonato de pentatlón moderno de Tokio 2020 será en un año más, una espera que el especialista chileno se toma con calma. Tal como cuando tuvo que empezar a entrenar en casa, una incomodidad que aprovechó para compartir por sus redes sociales.
“La suspensión de los Juegos ya pasó. Fue impactante cuando se supo, pero yo como deportista cambio los objetivos, cambio las fechas, así que va a ser un día más de entrenamiento. No lo veo con un peso emocional”, señala el atleta sobre las fechas que se cumplen por estos días.
Ahora, con el permiso que el Minsal y el Mindep entregaron a los deportistas, Bustos está más tranquilo, puede ir al Estadio Nacional a practicar, pero en su particular disciplina, que combina esgrima, natación, equitación, tiro y trote, no es suficiente. “Mientras me mantuve entrenando en la casa, dentro de todo ha sido bueno. Ya con el permiso comencé a nadar, lo que me tiene muy contento, era un deporte que no practicaba hacía meses. El retorno al agua siempre trae una sorpresa, para bien o para mal. A veces uno se sorprende porque volvió bien o porque no volví como creía. Ya me ha pasado antes tras lesiones”, explica.
El multideportista está contento, pero sabe también que el trabajo no está completo “Han sido buenos los entrenamientos, buenas las sensaciones, lo nuevo lo añadimos a la rutina que ya teníamos, con el trote en el mismo Estadio Nacional, la equitación en el Santiago Paperchase, ahí están esperando que vaya a montar, es lo que más me falta. Solo me habilitaron la piscina del Estadio Nacional. Para la equitación habrá que esperar las próximas semanas. Eso lo vieron la federación y el cuerpo técnico. Obviamente necesito más, también un lugar para correr, pero se entiende que hay que mantener el distanciamiento social, yo he ido al Estadio Nacional y se ve muy poco movimiento, las pistas están separadas, tiene que haber horarios y todo”.
Bustos tiene esperanzas de que las competencias que están programadas se realicen, en especial porque aún quedan muchos cupos olímpicos por llenarse, lo que podría sumar a otro chileno en Tokio. “El Mundial en México, en noviembre, y si no se suspende, vamos a ir. Pero se entiende que la lógica de lo que queda de este año va a ser para retomar el deporte, tiene poco sentido preparar una competencia o hacerla un evento fundamental. Iríamos, las competencias siempre son importantes, pero el enfoque, las curvas y la planificación están puestos en Tokio”, cierra el pentatleta.