No cabe duda que Marcelo Ríos dejó una huella profunda en la historia del tenis. Es que a diecinueve años de su retiro, el otrora número uno del mundo sigue siendo recordado como uno de los grandes talentos que pasó por el circuito.
En ese sentido, el ex colega del “Chino” -el estadounidense Todd Martin- se refirió al chileno en una entrevista con el sitio claytenis.com, llenándolo de loas: “Vio y sintió el juego mejor que nadie. Marcelo era asombroso sin parecerlo”, expresó quien llegó a ser el cuarto mejor jugador del planeta en septiembre de 1999.
Quien lideró el Salón de la Fama del Tenis entre 2014 y 2022, agregó que “en ese momento, Andre era el único que era grande sin tener un tiro que todo el mundo temía. Digamos, Sampras, gran saque, derecha y volea; Ivanisevic, saque increíble; Rafter, fuera de este mundo en la red. Con Marcelo no era como: ‘No puedo pegarle a su revés’, ‘no puedo probar su derecha’ o ‘espero que no saque como el otro día’... simplemente lo hacía todo muy bien. El mejor en ese corto periodo de tiempo”.
De todas formas, Martin supo contrarrestar el juego del nacional al imponerse en los dos únicos duelos que disputaron. Sin embargo, considera que su entrenador cumplió un rol clave en esos triunfos: “Hizo un buen trabajo. No mucha gente encontró el camino contra él. Ríos torturaba a otros jugadores. Hacía los partidos muy difíciles para casi todos, especialmente para los que jugaban más con la fuerza que con la cabeza”.
Para el ganador de ocho títulos, el oriundo de Vitacura “trabajaba muy bien el ritmo. Le gustaba dominar la potencia, así que no le tenías que dar potencia. Yo era un gran jugador de ataque, y contra Marcelo no le daba ningún patrón: le pegaba suave, le pegaba fuerte, le pegaba alto… nunca le mostraba lo mismo dos veces. Al final seguía atacando, pero si le pegabas a 150 km/h todo el rato… ¡no había posibilidad de ganar! Cuando empecé a bajarlo a 80, no sabía qué hacer. Se habría dado cuenta si hubiera jugado más veces contra él”, confesó.
En ese sentido, el también finalista de dos Grand Slams -Australia 1994 y US Open 1999- comparó al chileno con otro controvertido jugador, el australiano Nick Kyrgios: “Las similitudes entre ambos están aquí (señala su corazón) y aquí (señala su cabeza). Con problemas, sin la seguridad necesaria para comprometerse con la competición, sin estar preparados para dar lo mejor de sí mismos”.
No obstante cree que “Marcelo tenía algunas de las mismas inquietudes, pero estaba mucho más centrado, mucho mejor que Kyrgios. Pero también divide a este deporte”, señaló.
Ingreso al Salón de la Fama
Muchas veces se ha dicho que el comportamiento y conducta de Ríos son las razones para negarle el ingreso al Salón de la Fama del Tenis al otrora mejor raqueta del planeta.
Dicha afirmación fue negada por el ex top ten, quien afirmó que “el criterio principal es haber tenido una carrera distinguida en la competición a nivel internacional. A partir de ahí se vuelve muy subjetivo. Puedes fijarte en la carrera de Jim Courier y podríamos tener opiniones diferentes. Así que cuando enviamos los nombres de los elegibles al comité, hay diferentes opiniones sobre lo que es importante. ¿Son los Grand Slams el único dato que importa? Qué pasa con el ranking, qué pasa con otros torneos que han ganado, cuánto han estado al tope del ránking, top ten, porcentaje de victorias-derrotas. Así que una vez que todos esos datos llegan a las 175 personas que toman las decisiones, los jugadores son vistos de forma muy diferente”, aclaró.
Finalmente, Martin aprovechó de recalcar que el zurdo de Vitacura sí ha estado en posición de ser elegido como miembro: “Seguro, seguro. La mayoría de los jugadores que se retiran anualmente no son elegibles, pero Marcelo sí”, concluyó.