La ANFP justifica la suspensión de la Supercopa y culpa a la DPR: “No podíamos seguir esperando la autorización”

En la ANFP hay desazón. Felipe de Pablo, gerente de operaciones del organismo, no lo oculta. La suspensión de la Supercopa es un nuevo golpe para la actividad. “Es triste. Hemos venido trabajando en La Serena, las exigencias fueron tratadas y conversadas con la autoridad. Tuvimos que tomar esta decisión porque no podemos seguir esperando. Hay recursos comprometidos, Carabineros está en la planificación. Ya había un riesgo en términos deportivos y que los guardias no viajaran. La medida es irreversible, el directorio informó la decisión. Para nosotros esto es serio”, dijo a Canal 13.

Desde la Delegación Presidencial aseguraron que el partido se podía jugar si la organización cumplía con las exigencias. “Como ANFP no nos vamos a pronunciar de lo que diga la autoridad. Había un cronograma y eso indicaba que el viernes entregamos una carta con 16 puntos comprometidos, una base de datos que construimos con el municipio. Hoy en Chile no existe la geolocalización por RUT, pero este lunes a las 11 am nos dijeron que la venta debía ser suspendida. Ellos la habían autorizado el viernes. Pedimos las razones y corregimos 7 mil datos. Enviamos una base de datos. Hasta ahora no nos han indicado porque fue suspendida la venta”, puntualizó De Pablo.

“Habían hoteles que cerraron 50 habitaciones para alojar a los clubes. Cumplimos con los compromisos que el delegado nos solicitó de llevar a los dos equipos fuera de la ciudad, los llevamos a Ovalle. La póliza de seguro está vigente y no la tenemos de un kilómetro a la redonda, sino de tres”, añadió.

Sobre los fallos de parte de la ANFP, el gerente de operaciones asegura que es una interrogante a la que deben responder las autoridades. “Habría que preguntar que falló. He preguntado y no tengo respuesta por parte de la delegación. Nosotros tenemos todo, hasta enviamos los contratos de la empresa. Nos gustaría saber que pasó, pero no podemos seguir esperando”, señaló.

En esa línea, expone los pasos que dieron desde el ente rector para que se pueda disputar el duelo. “Cuando se decide este partido, comenzamos nosotros los trabajos con las distintas regiones. Un Colo Colo contra Universidad de Chile no se programa de un día para otro. Hay que encontrar dueños de estadios que quieran recibir. En Concepción hicimos la consulta, pero no formal. En Temuco el alcalde quería, pero después hubo temas que superan al fútbol y nos dijeron que no podían recibir la Supercopa”, aseguró

“Nos citaron muchas veces. Acá trabajamos por 30 días. Para mi es lamentable. Nosotros somos una actividad profesional que mueve a millones de niños. Los clubes no son solo los equipos que se presentan en los fin de semana. Esto no es una derrota para un sector, acá pierde la actividad deportiva”, agregó.

También abordó el rol de Pablo Milad en las negociaciones, quien ha estado desparecido de la luz pública en las últimas semanas. “El directorio se reunió con el presidente, el firmó la carta. Lo mío es estrategia de seguridad. El presidente debería exponer. Él está en la sede, trabajando día a día. Nosotros tenemos comunicación directa. A veces es ingrata esta actividad. Es más fácil criticar. Nosotros solemos dar la cara desde el lado del fútbol. Hay un trabajo detrás. Yo represento a instituciones, no vamos a permitir que esta actividad se la termine llevando gente”, comentó.

Finalmente, se refirió a las amenazas de la Garra Blanca de suspender el partido frente a la imposibilidad de viajar para los barristas. “Desconozco si primaron, siempre va a haber. Nosotros las condenamos. Lamento que esto se vea opacado por delincuentes”, cerró.