El belga Marouane Fellaini se enojó con su ex auspiciador de zapatos y lo demandará por 2,3 millones de euros. Según publicó el Daily Mail, el jugador asegura que los botines le causaron un "daño considerable".

Una de las pruebas presentadas fue que el utilero del Manchester United debía cocer los zapatos antes de cada partido para poder usarlas.

Fellaini firmó un contrato de cuatro años con New Balance en 2012. No obstante, acudió a presentar la denuncia por el daño que pudieron causarle durante ese tiempo y en su rendimiento posterior. El monto que solicita corresponde al periodo que faltó por cumplir del acuerdo.