Bill Belichik dejó de ser el director técnico de los New England Patriots bajo el rótulo del entrenador más grande de todos los tiempos. El longevo estratega de 71 años y el equipo de Massachusetts decidieron acordar una salida en buenos términos de la franquicia, en la que fue la casa del DT durante 24 temporadas.
El más grande de todos
En su mítica trayectoria con los Patriots, Belichik ganó 17 torneos divisionales, 10 campeonatos de la Conferencia Americana y fue el vencedor en seis Super Bowls (36, 38, 39, 49, 51, 53), construyendo así, la dinastía más dominante de toda la historia de la NFL junto a Tom Brady, jugador que también tiene la fama de ser considerado como el mejor de todos los tiempos en su especialidad.
El Quarterback (mariscal de campo) fue el jugador más importante que formó Belichik durante toda su carrera y gracias a sus hazañas en conjunto -más un Super Bowl que Brady ganó en los Tampa Bay Buccaneers-, le dan el título del QB más ganador del fútbol americano (7 veces) y uno de los deportistas más exitosos que se han visto nunca en el mundo.
Otro récord que inscribió el coach en el libro sagrado de la NFL, fueron las 302 victorias totales en todas las campañas que dirigió. Una cifra impresionante si además se tiene en cuenta que 31 de esos 302 partidos fueron en rondas de playoffs. En el historial, Belichik se encuentra a 26 conquistas de igualar a Don Shula, adiestrador que registró 328 triunfos cuando dirigió a los Baltimore Colts desde 1963 a 1969 y a los Miami Dolphins desde 1970 hasta 1995.
Sin embargo, a pesar de todos los récords y momentos de gloria, el término de su vínculo con la organización se da producto de las magras últimas temporadas. Desde la partida de Brady a Tampa y su posterior retiro, los Patriotas solo se metieron en postemporada de la campaña 21/22, no obstante, en la Ronda de Comodines fueron aplastados por 47-17 por sus rivales de la división Este de la Conferencia Americana, los Buffalo Bills.
En las temporadas 22/23 y 23/24 los de Nueva Inglaterra solo ganaron 12 de los 34 partidos posibles. Un bajo rendimiento que les significó ocupar el último lugar de su división en 2024, y la cuarta peor posición de las 32 franquicias de la NFL. Además, Mac Jones -mariscal de campo que tuvo que remplazar a Tom Brady- tuvo 12 intercepciones de balón que derivaron en la pérdida de su puesto como titular y terminaron por ser el gatillante para la salida del mítico estratega.
Tras el anuncio del despido de su gran amigo y compañero de múltiples batallas, Tom Brady le dedicó unas emocionantes palabras en su cuenta de Instagram. “Estoy increíblemente agradecido de haber jugado para el mejor entrenador de la historia de la NFL. Fue un gran líder para la organización y para todos los jugadores que jugaron para él. Juntos logramos cosas asombrosas durante un largo período de tiempo, muchas de las cuales serán difíciles de replicar”, dijo rememorando los momentos que compartieron por casi 20 años.
“Él trabajó todos los días para ayudarnos a alcanzar la meta final, en el deporte de equipos más difícil de todos. A medida que íbamos triunfando, las lecciones más valiosas que aprendí fueron cuando la adversidad se volvía cada vez más desafiante. El sentó el tono para la organización, de nunca desfallecer ante la adversidad y que mientras pudiéramos hacer lo que sabemos hacer y estuviera bajo nuestro control, debíamos salir y hacer nuestro trabajo. Nunca hubiera sido el jugador que fui sin ti coach Belichik. Estaré por siempre agradecido y te deseo la mejor de las suertes en lo que sea que elijas en el futuro”, cerró en el comunicado.
En su despedida, Robert Kraft, propietario de los New England Patriots, convocó a una conferencia de prensa para darle un último reconocimiento al múlticampeón con la franquicia. “El entrenador Belichik será celebrado por siempre como un legendario ícono deportivo aquí en Nueva Inglaterra. Él y Brady fueron los dos mejores de la historia en su profesión y tuvimos la suerte de tenerlos con nosotros por dos décadas”, comentó en señal de agradecimiento por los años gloriosos que vivió el equipo y la ciudad entera.
Belichik por su parte, también tuvo un momento para dirigirse una vez más a la afición que coreó su nombre en el Foxborough Stadium en innumerables ocasiones. “Para mí este es un día de gratitud y celebración. Seré por siempre de los Patriots y miro hacia adelante cuando pueda volver aquí, sin embargo, en este momento debo irme. Estoy ansioso por lo que pueda deparar mi futuro”, concluyó emocionado la leyenda viva de la NFL.