El primer paso, en la cancha, de la selección chilena de Reinaldo Rueda fue el 24 de marzo, en el estadio Friends Arena de Solna, ante una selección sueca que se instaló en la Copa del Mundo sacándose del camino a un par de colosos: nada menos que Holanda e Italia. Para ese objetivo, una pieza relevante dentro del diseño del seleccionador Jan Andersson fue el volante Emil Forsberg, quien heredó la camiseta 10 que dejó el renunciado Zlatan Ibrahimovic.

Este martes, el jugador anotó el gol de la clasificación de los suecos a cuartos de final del Mundial. Con un remate de derecha, que se desvió en el zaguero Akanji, batió a Sommer y puso a su país entre los ocho mejores.

El pasado 15 de marzo, cuando Suecia entregó la nómina para los amistosos ante Chile y Rumania, Andersson se refirió ante un eventual retorno de Ibrahimovic. "Si los jugadores cambian de idea, deben hacérmelo saber, entonces tendremos una discusión. Es divertido que todos quieran jugar en la Selección, pero eso no varía mi punto de vista. Respeto su decisión, la cuestión está cerrada para mí", sentenció. Zlatan renunció a su combinado nacional luego de la Eurocopa 2016. En ese certamen, Forsberg usaba la dorsal número 6.

El mediocampista del Leipzig (26 años) ha tenido una carrera en franco ascenso desde 2009, cuando debutó con el GIF Sundsvall. Tres años más tarde pasó al Malmö, el mismo club donde surgió Ibrahimovic y pasó Miiko Albornoz. No obstante, el salto internacional y la ganancia en notoriedad la ganó en el Leipzig alemán, al cual arribó en 2015 y tiene contrato hasta 2022, aunque elencos de mayor linaje lo tientan para emigrar. Al equipo de la Red Bull le costó 3,7 millones de euros (US$ 4,5 millones). En marzo, su valor de mercado era de 25 millones de euros (US$ 31 millones), según el portal Transfermarkt.

El Leipzig fue la gran sensación de la Bundesliga 2016-2017, siendo el escolta del superpoderoso Bayern Múnich, con lo cual clasificó por primera vez a la Champions League. El aporte de Forsberg fue nada menos que erigirse como el mayor asistidor de esa liga, con 20, muy por sobre los 12 de Ousmane Dembélé, hoy en el Barcelona, por el Borussia Dortmund. En el torneo 2017-2018 finalizaron sextos.

Diestro, de mucha técnica, tiene características de enganche aunque juega abierto. Fue elegido como el mejor volante sueco del año en 2014, 2016 y 2017. Saltó de la Sub 19 a la selección absoluta en 2014 y jugó la Eurocopa de hace dos años, en la cual su país tuvo un opaco desempeño. Con los escandinavos tiene 40 partidos internacionales y ha anotado siete veces. En el dibujo 4-4-2 clásico que utiliza el DT Janne Andersson, Forsberg se ubica como el volante de salida por la izquierda, jugando con el perfil cambiado. Su pegada le hace ser el favorito para lanzar los tiros libres.

En la eliminatoria para el Mundial de Rusia sumó cuatro goles en 1.064 minutos, y en la serie de repechaje con Italia fue uno de los puntales. En el juego de ida, que ganaron los suecos 1-0, dio 23 pases, con un registro nada despreciable del 91,3 por ciento de eficacia. Sin la presencia de la última gran estrella sueca, el popular Zlatan, Forsberg tomó la camiseta 10 y la conducción de los europeos, instalados en cuartos de final.