Gabriel Ruiz Tagle se baja de la lucha por Colo Colo: "He decidido no repostularme a la presidencia"
Después de un año de gestión en Colo Colo, marcado por una dura guerra interna con el principal accionista Aníbal Mosa, el empresario revela las razones de su automarginación de la carrera por la testera, a una semana de la junta ordinaria.
Colo Colo vive una semana clave en temas de corbata y poder. El próximo lunes 29, en la Junta de Accionistas de ByN, se define principalmente al directorio de la concesionaria y a quien será presidente de la institución. Decisiones que se deben tomar en medio de un clima bélico que sacude hace mucho a la sociedad anónima y que en el último año ha tenido como protagonista a Gabriel Ruiz Tagle (65 años).
El actual timonel del Cacique atiende a La Tercera y sorprende con una revelación que altera todo este escenario electoral.
A una semana de la junta de accionistas, ¿cuál es la evaluación de su año de gestión?
En lo administrativo los números son buenos. Entregamos un balance positivo después de siete años de números rojos. Nos propusimos modernizar la administración. Hicimos una nueva estructura y gran parte de ella quedó implementada. Establecimos una política del club con visión de futuro y, lo más importante, es que entregamos las decisiones deportivas a los expertos, que es un tema grande. En las series menores implementamos el proyecto 60-40, que esperamos marque un antes y un después. La meta es que para el centenario del club, el año 2025, el 60 por ciento del primer equipo sea formado en casa. Hoy, ese número está cercano al 34.
¿Cree que el Colo Colo de hoy es distinto al que usted encontró el año pasado?
Absolutamente distinto. Es un club que está ordenado. Tenemos las cuentas claras, transparentes. Segundo, es un club con visión de futuro, con metas claras. En tercer término, es un club con una estructura administrativa mucho más robusta, pero todavía nos queda bastante por implementar en eso. Hay cuatro gerencias con presupuesto y herramientas, como tiene que ser en un club como Colo Colo. Antes, todo esto lo resolvía solo el presidente sin el soporte técnico que corresponde y ese tipo de administración está totalmente obsoleto en el fútbol actual.
Lo que no cambió fueron los problemas dirigenciales. En ese sentido, ¿cuál fue su principal acierto y su máximo error?
Difícil pregunta. Creo que el principal acierto fue fortalecer la gerencia deportiva de la mano de Marcelo Espina. La elección de los refuerzos y de un entrenador no puede ser resorte de un directorio. Estas determinaciones deben tener, obligatoriamente, un respaldo técnico. La llegada de Marcelo vino a cubrir estas falencias graves que tenía el club y que se arrastraban por años. Ahora, mi principal error, creo que fue haber entrado en el juego de un director ofuscado por su derrota después de las elecciones del año pasado…
¿Se refiere a Aníbal Mosa?
Sí, claro. Yo debiera haber priorizado los temas del club sobre discusiones personales. En momentos le presté demasiada atención a su ofensiva, lo cual llevó a que la atención de los medios se centrara en una pugna que, la verdad, no hubiera existido si este director hubiese asumido desde el primer día su derrota y hubiera aportado, desde su rol de director, al desarrollo del club. Sin embargo, desde el primer día buscó desestabilizar la gestión por medio de acciones de toda índole y acusaciones infundadas. Pese a eso, creo que logramos avanzar.
¿Se refiere a acciones particulares suyas y las polémicas con Mosa?
Claro, todas esas cosas que, de alguna manera, hicieron que la atención se fijara en temas que no eran el club mismo ni su desarrollo. Para mí, fue un error preocuparme de ese tipo de situaciones por sobre el club.
¿Cuál fue su momento más tenso que vivió en este retorno a ByN?
Creo que lo que pasó en el Superclásico fue lo más complejo que nos tocó enfrentar, porque determinó una sanción inédita al Monumental. Si bien fueron hechos totalmente inaceptables, recibimos una sanción donde no se midió, estoy seguro, con la misma vara respecto de incidentes en otros recintos. Esto queda en evidencia con las sanciones menores que recibió Universidad de Chile por hechos similares ocurridos en el Estadio Nacional.
¿Considera que abordó bien ese tema con la barra? ¿Le faltó ser más duro?
Fue bien difícil, pero creo que se hizo un trabajo profundo para reestablecer nuestra confianza con la autoridad y mejorar los protocolos de seguridad en el estadio. Hasta ahora, no se han repetido estos incidentes. Esa situación está normalizada, lo que no quita que el club sufrió un gran perjuicio por culpa de un pequeño grupo de exaltados que hizo un gran daño.
Con todas estas polémicas dirigenciales que vivió, ¿tiene deseos de seguir en la presidencia de ByN?
Luego de una reflexión bien profunda, he decidido no repostularme a la presidencia. Siento que el club necesita una renovación, de manos de personas que interpreten un plan de futuro no contaminado con metas personales.
¿A quién se refiere con lo de metas personales? ¿A usted? ¿A Mosa?
No, no me refiero a mí. Nosotros teníamos claro una carta de navegación con lo que Colo Colo necesitaba este año, después de un período donde el club tuvo demasiados problemas, pérdidas por más de 10 millones de dólares, en la administración del señor Mosa. Con ese daño, que ponía en riesgo la estabilidad del club hacia adelante, realmente se hace patente que el club necesitaba una renovación de personas, que en un futuro no contaminen esto con metas personales.
Entonces, oficialmente, usted ya no se presentará a la reelección como presidente de ByN.
No. Es una decisión tomada. Confío en que durante este año hemos sentado bases importantes para el futuro del club y para que el presidente que venga se encuentre con una institución más moderna y más ordenada.
Supongo que cuando retornó al club no pensó que sería solo por un año…No, efectivamente no, pero producto de todas estas situaciones se produce esta junta de accionistas que interrumpe un período que era más largo, pero que es la realidad que hemos debido enfrentar.
Ahora bien, ¿su idea es seguir en el directorio? ¿Mantendrá sus acciones?
Volví a Colo Colo para tratar de ayudar. Me di cuenta de que había una situación que ya no daba para más, que podía llevar a Colo Colo a una situación parecida a la de unos años atrás con respecto a la quiebra. Esa fue la razón principal por la que yo decidí volver. Ahora, no voy a vender mis acciones. Lo único que estoy evaluando es si voy a seguir en el directorio.
Con usted fuera de la presidencia y con Leonidas Vial prácticamente fuera del directorio por decisión propia, ¿su bloque presentará algún proyecto para competir con Mosa?
Estamos trabajando para presentar una propuesta. Conocimos de primera fuente las prioridades que necesita el club. Ya dimos el primer paso y confiamos en que puede ser un gran camino para el centenario del 2025. Vamos a presentar una propuesta y de ahí veremos cómo es escuchada y valorada.
¿De verdad cree que la Corporación votaría por ustedes después de la demanda de Vial contra ellos?
La verdad no lo sé, pero tengo claro que las elecciones deben votarse hacia el futuro y no hacia el pasado. Con el Club Social hemos avanzado mucho este año. Resolvimos todas las demandas cruzadas que había entre ByN y el Club Social. Hemos llegado a acuerdos importantes, como la autorización para que ellos puedan desarrollar sus áreas deportivas. El Futsal se juega con financiamiento aparejado. Ellos pueden contar en forma gratuita con la indumentaria Umbro, por iniciativa nuestra. Todos estos hechos dan cuenta de que lo que hemos avanzado ha sido muy positivo para ellos en todos los aspectos, en base a iniciativas nuestras.
¿Y qué proyecto le ofrece su bloque al Club Social?
Hay que dar el siguiente gran paso, que es renovar la estructura del estadio Monumental, que está con muchas falencias, obsoleto en numerosas de sus instalaciones. Durante este año hemos evaluado varios modelos de negocio que nos permitan cumplir con esta necesidad. Lo que hizo Palmeiras en Brasil es el camino a seguir, con un modelo de concesión que permita atraer a la industria del espectáculo. Es necesario tener atractivos extras para los inversionistas y uno de esos atractivos es tener una buena gestión y números azules. Lo segundo es tener una propuesta interesante para algún socio, que vaya más allá del estadio mismo. Por ejemplo, hemos planteado la opción de construir un polideportivo que permita albergar eventos de magnitud media y también sea utilizable por la Corporación para el desarrollo de sus ramas deportivas, por el compromiso que hemos adquirido con ellos durante este año de gestión.
Honestamente... ¿No se baja de la reelección porque ya se dio cuenta de que está perdida?
Más allá de cálculos electorales, por decirlo de alguna forma, recibir un club donde la convivencia se expresa a través de insultos, donde nosotros somos el único club del fútbol que periódicamente da un espectáculo público sobre este particular, es algo que la verdad a mí no me interesa seguir, bajo ningún punto de vista. Un directorio donde su funcionamiento está marcado por desconfianzas, ideologismos, aspiraciones personales, es algo que no resulta atractivo.
¿Que usted siga en el directorio depende de que Mosa sea presidente o no?
Mi decisión es más profunda que eso. Te repito, esto no es cálculo. La verdad es que presidir un club en esos términos de convivencia no me interesa. Es un desgaste personal y tampoco es bueno para el club.
¿Qué puede decir sobre los préstamos de Mosa a ByN que investiga la CMF?
Es una investigación reservada, pero que da cuenta de los numerosos desórdenes que existían en el club. Existen préstamos que no fueron debidamente aprobados por el directorio ni fueron comunicados a la mayoría de los directores, lo que contraviene la ley. Y eso conllevó una utilidad para el señor Mosa. Todas esas cosas hacen parte de una administración desordenada, que llevó al club a una situación extrema. Junto con las pérdidas, el descontrol era algo que no tenía un límite.
Si se va, ¿el proyecto con Espina y Salas peligra?
Espero que no. Sería un retroceso enorme. Creamos una gerencia deportiva empoderada, donde los cargos no dependan del mando de turno. La institución no puede volver atrás.
¿Marcelo Espina y Mario Salas ya saben su decisión?
Marcelo fue la primera persona que conoció esta determinación. A Mario se lo comenté después del partido con Huachipato, porque no quería entorpecer su preparación. Ellos saben cuál es mi determinación y cómo miramos el futuro de Colo Colo.
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