Este sábado, la Roja vive su primera definición en el Mundial de Polo de Australia, ante Inglaterra, por el último partido del Grupo B (ver tablas). Y llega tras dos goleadas, que le dan cierta ventaja: 9-2 a Nueva Zelanda y 11-2 a India.
Pero no sólo Chile ha aplastado, sino que la cita ha visto otros impresionantes resultados.
De los 10 partidos del torneo disputado en Santiago en 2015, dos fueron de amplio margen: Inglaterra venció por 13-6 a Pakistán y Estados Unidos le ganó por 15-9 a los británicos. Pero en ocho partidos de este año, cuatro fueron palizas: junto a las victorias nacionales, los ingleses propinaron un 16-1 a India y Argentina goleó a España por 12 a 3,5.
¿Y por qué, si cada equipo debe sumar 14 goles de hándicap?
Es que cada federación evalúa los polistas en su país con una comisión que vota por mantener, aumentar o bajar la nivelación cada año. "Es más o menos lo mismo en todos los países. Lo principal es el desempeño personal del polista y los resultados de su equipo", explica Gerardo Valdés, presidente de la Federación Chilena de Polo.
Pero otros factores pesan en los equipos. "Por no estar en sus propios caballos, algunos jugadores bajan su rendimiento", plantea el entrenador Martín Zegers.
Y su colega Alejandro Vial agrega: "Un jugador de hándicap cuatro puede ser puesto al ataque, aunque sea mejor en defensa. Además, argentinos y chilenos compiten en un nivel más alto que los indios, por ejemplo. Y no es igual un veterano de cinco goles que un joven de cinco tantos".
Para Valdés, además, "quizás un equipo de igual hándicap que el rival funciona mejor en forma colectiva".
Pero para este sábado (a las 00.30 de Chile) se espera un duelo estrecho ante Inglaterra. La Roja es el único invicto del Grupo B y no extrañaría una victoria para llegar en esa condición a la final.
"Inglaterra es un equipo bravo", dice José Miguel Pereira (4) sobre el cuarteto guiado por Peter Webb y Satnam Dhillon (hándicap 5).
"Webb tiene un taqueo impresionante y Dhillon es muy bueno y experimentado. Pero los ingleses usan mucho sus individualidades, tienen poco juego en conjunto. Y nuestro equipo funciona muy bien, sin un jugador muy arriba de los demás. El juego grupal es nuestra arma", evalúa Martín Zegers, rumbo a la primera definición de Chile en la cita.