Consagración. Novak Djokovic consiguió su último anhelo, el único logro que le faltaba en su laureado palmarés. El serbio por fin puede decir que tiene el oro olímpico entre sus manos luego vencer a Carlos Alcaraz, por parciales de 7-6(3) y 7-6(2), en la final del tenis de París 2024.
En la capital francesa, una ciudad que le ha sido históricamente compleja, volvió a conseguir un hito. Pese a las adversidades que ha afrontado en la arcilla parisina, ahí también se convirtió en el más ganador de títulos Grand Slam. Ahora, nuevamente en la Philippe Chatrier, engrosó su exitosa carrera al lograr ganar todo lo que podía ganar como tenista. Finalmente, consiguió la presea que le faltaba en sus vitrinas, una que le fue esquiva en cuatro ocasiones, y completó el Golden Slam.
Fue el reflejo de la antigua contra la nueva generación, una vez más enfrentados. El partido por la medalla dorada fue un verdadero espectáculo. Ambos sacaron a relucir lo mejor de su reportorio en un encuentro que duró dos horas y 42 minutos.
El mejor de todos
Cada uno se hizo fuerte con su servicio, en una final que no pudo tener otro trámite. Fue una incansable lucha desde el primer minuto. Nole intentó presionar desde el inicio con un juego agresivo, pero Alcaraz supo contrarrestar esos momentos de tensión.
El noveno game fue una muestra del espectáculo que se vivió. El murciano comenzó a tener mejores sensaciones, mientras que Djokovic lo empezó a pasar mal. Hubo intercambios de altísimo nivel y, cuando parecía que el español lograba quebrar, el serbio mostró su jerarquía. Fueron múltiples oportunidades de break, pero el balcánico se impuso, en un set que terminó siendo clave.
Todo se terminó decidiendo en el tie break, donde Nole fue mejor. Su hambre pudo más y aprovechó los errores de Alcaraz. Fue una intensa batalla de una hora y 33 minutos.
El murciano logró dejar atrás la impulsividad y el set anterior. Se pudo recomponer y volver a disputar palmo a palmo, golpe a golpe contra Nole. Francia presenció el mejor tenis del mundo. Sin embargo, uno tenía que ganar.
Nole estaba totalmente mentalizado y volvió a imponerse en el tie break. En la definición hubo dudas de un lado y determinación del otro. Así, Djokovic se convirtió en el tenista más longevo en ganar un oro olímpico, con 37 años, y vuelve a despejar cualquier argumento sobre su estatus como el mejor de la historia.
Luego de coronarse en París, Nole entregó sus sensaciones tras una incansable lucha con Alcaraz. “Tres horas y dos sets, ha sido una lucha increíble. Jugué mi mejor tenis. Estoy en shock. Puse mi alma, mi cuerpo, a mi familia para ganar el oro olímpico y por fin lo he conseguido”, señaló antes de quebrarse.
“Es el mayor logro de mi carrera. Por el viaje tan largo que me ha llevado. Por jugar cuatro semifinales. Porque la presión fue creciendo. Por eso, el oro lo pondría en el top de mi carrera”, añadió.
Finalmente, habló del esfuerzo que realizó para lograr la medalla de oro: “He conseguido todo con esta medalla de oro, pero amo al tenis y juego porque me gusta este deporte, perfeccionar mi juego, entrenar cada día... Este éxito no es una coincidencia, sino fruto del esfuerzo. No sé cuál será mi futuro. Ahora sólo quiero disfrutar. Ha sido un largo viaje imaginando este momento”, expresó.
También le dedicó palabras de elogio al español: “Me quedaba la montaña más grande por escalar, porque Alcaraz está en un gran estado de forma. Tres horas en dos sets no las habré jugado muchas veces en mi carrera... Tengo que darle un gran crédito, es un gran chico y un jugador estupendo”.