Christian Garin (32°) tuvo todo para ganar hoy ante Borna Coric, 14 del mundo y segundo cabeza de serie del ATP 250 de 's-Hertogenbosch. Sin embargo no supo cerrar el partido y dejó ir de forma dolorosa el que iba a ser el segundo mejor triunfo de su carrera.
El chileno no perdió el partido en el match point que tuvo en el tie break del tercer set, con el saque de su rival, sino que un poco antes, cuando gozó de dos quiebres a su favor para cerrar el partido con comodidad. Sin embargo, su primer servicio no lo acompañó y terminó cediendo el encuentro por 6-7 (4), 6-3 y 7-6 (8).
El rival no era cualquiera, sino que un tenista de su misma generación, al que había derrotado en las semifinales del glorioso Roland Garros junior en 2013 y que tuvo un salto a la élite más rápido que el del chileno. Incluso, se dio el lujo de ser uno de los pocos en vencer a Roger Federer en césped, el año pasado en Halle.
El comienzo fue vertiginoso, con ambos teniendo una alta efectividad con el primer servicio, lo que originó puntos cortos. El número del país aprovechó su revés como arma de ataque, complicando bastante al balcánico. De hecho, en el décimo juego dejó ir dos puntos de quiebre. Pero no sería tan terrible, ya que en el tie break se desquitaría, ganándolo por 7-4.
Al igual que en el partido contra Robin Haase, el Tanque ganó la mayoría de los rallies medios y largos, un factor que inclinó la balanza a su favor en esa manga inicial. Pero luego eso se diluyó.
En el segundo capítulo, Garin se mostró menos efectivo con su saque. De hecho, su primer servicio cayó a un discreto 41%, lo que fue muy bien aprovechado por el croata, quien con un quiebre en el séptimo y otro en el noveno juego niveló las cosas. Además, Coric conectó 16 aces, lo que también le ayudó a solucionar problemas.
Parecía que el pupilo de Andres Schneiter no estaba para dejar escapar la victoria y en el comienzo del tercer set recuperó la concentración y quebró de entrada gracias a un muy buen juego de devolución. En el séptimo game logró una ruptura, pero los fantasmas del pasado le impidieron cerrar el encuentro, y terminó lamentando una derrota.
Este duro revés le impidió al chileno acariciar por primera vez en su carrera el top 30, en una temporada que, pese a lo de hoy, sigue siendo de ensueño.