Mucho interés había generado la llegada del hijo del entrenador del Atlético de Madrid al fútbol chileno, pero todo indica que el jugador de 20 años tiene todo arreglado para jugar en Gimnasia y Esgrima La Plata.
Sin pena ni gloria fue la temporada de Simeone en Unión La Calera. Tan sólo jugó en las divisiones inferiores y un par de partidos en la Copa Chile, pero sin ser el factor influyente que se creyó que podía haber sido. A mediados de octubre, desde el club aseguraban que la poca participación del jugador, se debía a su inmadurez mental y futbolística.
En las redes sociales se ha comentado que su llegada al cuadro de Gimnasia no es bien vista, ya que su padre, Diego Simeone, dirigió a Estudiantes de La Plata, eterno rival del conjunto Lobo.