Para intentar resumir en una estadística la brillante carrera de Emanuel Ginóbili en la NBA basta decir que es el séptimo jugador en la historia de la liga con más partidos de playoffs. En un campeonato tan competitivo como agobiante, el bahiense se dio el lujo de clasificar en sus 16 temporadas en San Antonio Spurs a la postemporada, inscribiendo su nombre en cuatro anillos de campeonato de la franquicia.
Ahora, aquella racha consecutiva llega a su fin. El Maradona del básquetbol argentino decidió poner fin a su extensa y brillante carrera. A los 41 años, Ginóbili dijo basta. Ni siquiera los cuatro meses que intentó Greg Popovich para convencerlo de seguir con la franquicia texana fueron suficientes. El 20 de los Spurs seguramente no tendrá otro dueño en San Antonio.
Quizás si el mayor elogio que pudo recibir Ginóbili a lo largo de su trayectoria, que además de los cuatro títulos de la NBA incluyó una medalla dorada con Argentina en los Juegos Olímpicos de 2004, la entregó el periodista Mike Monroe. "Entre 2004 y 2007, él fue el mejor jugador del mundo. Cualquiera que no lo crea debería ver lo que hizo en Atenas. Todos los equipos de la NBA empezaban su preparación tratando de descubrir cómo detenerlo", publicó en el San Antonio Express News hace algunos años.
"Con una gran mezcla de emociones les cuento que decidí retirarme del básquet... Fue un viaje fabuloso que superó cualquier tipo de sueño. Gracias!", publicó el bahiense en twitter. Detrás de ese mensaje quedaban 23 temporadas como profesional y una cantidad de estadísticas impresionantes. Asimismo, los Spurs veían partir al último integrante del glorioso Big Three, que integró junto a Tim Duncan, retirado hace algunos años, y Tony Parker, quien en la próxima campaña defenderá los colores de Charlotte. Y la NBA se quedaba sin uno de sus jugadores favoritos, como expresó en su cuenta oficial: "A sacarse el sombrero ante una auténtica leyenda".