El equipo de época sigue demostrando que las bajas no le afectan. Golden State ganó en su primera visita a Portland en las finales de conferencia Oeste y quedó a un triunfo de clasificar a su quinta definición de NBA consecutiva. Los bicampeones vigentes ganaron 99-110 ante unos Trail Blazers que no supieron aprovechar la ventaja de hasta 18 puntos que tuvieron.
Que su máximo anotador Kevin Durant no estuviera no ha sido mayor problema para los Warriors. No, porque si no están él ni Cousins, Stephen Curry y Draymond Green son capaces de llevar al equipo a la victoria. Ambos han tenido un nivel sobresaliente en la definición ante Portland y en el tercer juego no fue la excepción. El base aportó 36 puntos para que su promedio en la serie sea ese mismo número. Green, por su parte, se inscribió con el séptimo triple-doble de su carrera tras dejar 20 puntos, 13 rebotes y 12 asistencias en los 38 minutos que jugó.
No fue un triunfo fácil. Portland tuvo hasta 18 puntos de ventaja, pero el arrollador paso de los californianos les hacía fallar. C J McCollum fue el máximo anotador de los Blazers con 23 puntos. No fueron suficientes, ni tampoco los 19 que dejó Damian Lillard, quien juega con una subluxación en la costilla desde el segundo partido. Por ahora, la primera final que alcanzan desde 2000, está quedando en manos de su rival, que se pone 3-0 en la serie, a un triunfo de llevársela.
Los números indican que nunca se ha remontado una llave de playoffs que vaya 3-0, pero sí han llegado a forzar el séptimo partido. Los Warriors quedaron a una victoria de estar nuevamente en la definición por el anillo. Los Blazers, el lunes tendrán otra oportunidad en su casa.