Ryan Palmer tiene 43 años, juega en el PGA Tour desde 2004 y ha ganado cuatro torneos, pero más importante que eso, al menos este jueves, es que dio el golpe inicial del retorno del circuito. Nacido, criado y aún residente en Amarillo, a un par de horas de Fort Worth, sede del Charles Schwab, fue el elegido para dar el primer golpe de la mañana en el campeonato cerca de Dallas.

Aunque una decena de aficionados se dieron maña para mirar desde afuera del campo y apoyar a sus jugadores favoritos, el primer día se guardó la distancia social, incluso entre un jugador y su caddie en la caminata, sin público y con bastantes disposiciones de seguridad sanitaria volvió este jueves el principal circuito. Eso en la parte positiva.

Lo malo es que fue un mal retorno para Joaquín Niemann. El chileno hizo un doble bogey (hoyo 13), tres bogeys (3, 5 y 15) y tres birdies (2, 8 y 16) en la primera ronda en el tradicional Colonial Country Club texano. Joaco se ubica 110º, en una tabla liderada, con -7, por el local Harold Varner III y el inglés Justin Rose.

En la jornada se cumplió con el minuto de silencio en memoria de George Floyd, justo a las 8.46 de la mañana, homenaje que se repetirá cada día del Charles Schwab.

Este viernes, Niemann volverá a salir junto al estadounidense Adam Long y el australiano Cameron Smith, esta vez desde el hoyo 10, desde las 8.23 de la mañana.

Historia similar fue la que vivió Mito Pereira en Jacksonville, Florida, por el Korn Ferry Tour. Con una tarjeta de cuatro sobre el par, quedó posicionado 133º. El líder es el francés Paul Barjon, con seis bajo la exigencia.