La continuidad de Gualberto Jara al mando del primer equipo de Colo Colo es insostenible. Así lo manifiestan los hinchas y también la mayoría del directorio, que la noche del martes fue testigo de un nuevo bochorno futbolístico. La goleada sufrida ante Peñarol, por la Copa Libertadores, ratificó que mantener el interinato del paraguayo hasta diciembre, como fue la voluntad inicial, cada vez es más complejo. E, incluso, ayer se produjo una nueva jornada de protestas e incidentes en el Monumental, por el rol de la concesionaria y el momento del equipo.
El tópico del fin anticipado del ciclo del exayudante de Gustavo Benítez será uno de los temas capitales en la reunión de la mesa alba, programada para hoy a las 15.00. Buena parte de los miembros ya tenía clara la idea de un cambio de mano hace un par de semanas. Sin embargo, algunos se encandilaron con la victoria ante los uruguayos y decidieron estirar el proceso más de lo debido.
Aparte del mal momento, la decisión de terminar anticipadamente se fundamenta en que increíblemente los albos todavía cuentan con opciones de clasificar a octavos de final de la Libertadores o al menos a la Copa Sudamericana, siempre y cuando venzan a Wilstermann en el Monumental en tres semanas, un lapso de tiempo considerable para que el nuevo DT se interiorice de la realidad del club y tome decisiones, más allá de que deberá cumplir cuarentena en su llegada a Chile. Las trabas sanitarias es otro asunto que pesa en esta misión de encontrar DT. Como sea, en Macul coinciden en que este es el momento del cambio.
Una vez sentenciada la salida del guaraní, quien probablemente retorne a sus funciones en las divisiones menores del Cacique tras el partido de este sábado frente a Huachipato, la discusión se centrará en la llegada del nuevo entrenador. La apuesta de Marcelo Espina es Gustavo Quinteros, quien está libre y dispuesto a tomar el desafío. No obstante, antes de que se selle todo, varios directores quieren discutir la forma en que se le pagará el sueldo al extécnico de la UC, quien en la precordillera ganaba cerca de US$ 700 mil por temporada.
Para nadie es un misterio que las arcas del club están debilitadas y su fichaje significa un gran esfuerzo económico.
En ese sentido, el propio Quinteros apunta que todavía no se han profundizado las conversaciones, probablemente a la espera de que el directorio en pleno vise su llegada. “Sinceramente no me ha llegado ninguna oferta formal del club”, señala a La Tercera sobre el interés albo, algo que debería cambiar en las próximas horas, más específicamente tras la reunión de esta tarde.
Otro de los puntos que estará sobre la mesa esta tarde es el referente a la Inmobiliaria Estadio Colo Colo. Este ítem probablemente sea uno de los que más tensiones levante en la mesa, pues el bloque vialista pondrá en discusión el sueldo que recibirá Harold Mayne-Nicholls como asesor, lo que para ellos es considerado como una maniobra para seguir pagándole después de que la mesa de ByN no le renovara sus facultades ejecutivas remuneradas.
La situación indignó al grupo opositor a Aníbal Mosa, sobre todo a Alfredo Stöhwing, quien es parte de ambos directorios y que se ausentó de la reunión en la que se decidió la nueva función del extimonel de la ANFP, por la que recibirá un sueldo de 166 UF brutas ($ 4.765.503) por un periodo de 12 meses. Además, se espera una larga conversación sobre lo que llevó a la suspensión del partido contra Deportes Antofagasta.