Gustavo Lorenzetti (35) apenas se asoma a la esquina. El volante de Iquique s mantiene una rutina de ejercicios online bajo las medidas de cuarentena decretadas en Iquique y aún ve lejos el retorno a la cancha, como lo han hecho en otros clubes. Su vida familiar enriquece sus días, por lo que no levanta quejas ante el encierro; tampoco al hablar del club que lo marcó, la U.
¿Cómo ha sido su encierro?
Gracias a dios lo llevamos bastante bien, yo tengo tres hijos y estamos en un departamento. Sinceramente pensé que iba a ser mucho más difícil, pero por suerte lo han entendido dentro de todo, se han portado bastante bien. Usamos mucho la tecnología, sobre todo con el más grande para entretenerlo. No es lo que se recomienda pero es un caso excepcional. Nosotros tratamos de entretenernos con juegos de mesa, tratando de cocinar algo entre todos y así van pasando los días. Lamentablemente parece que esto nunca tiene fin.
Por el lado familiar se agradece, no es habitual en los futbolistas.
Sí, eso es cierto. Seguramente los jugadores de fútbol nunca habíamos estado tanto tiempo en nuestras casas con nuestra familia. En ese sentido ha servido mucho para disfrutar en familia y ver crecer a los hijos. Son momentos que uno muchas veces se pierde por estar de viaje o concentrado. Lo más importante es que acá estamos todos sanos, te diría que hoy es un privilegio estar así.
¿Qué tan complicadas están las cosas en Iquique?
En estos momentos hay cuarentena obligatoria y toque de queda a partir de las 10 de la noche. Si mal no recuerdo Iquique fue una de las últimas en tener contagios y hoy hay bastantes para la cantidad de habitantes que tiene la región. Acá no fue enseguida el tema de la cuarentena, la gente seguía su vida normal. Yo estoy en un departamento frente al mar y veía reuniones familiares en la playa. No se tomó la conciencia necesaria en su momento y hoy se sufre un poco más todo.
¿Usted no sale?
Sinceramente, hace como 90 días que no salgo del departamento, porque al supermercado va mi mujer y yo me quedo con los tres chicos en casa. A pasear al perro a la esquina es lo único a lo que he salido.
¿No se vuelve loco?
Por suerte soy un tipo muy de casa, me cuesta salir. Es algo que continuamente me dice mi mujer, así que por ese lado no tengo tantos problemas. El mayor problema que yo pensaba que podía tener era tener a los niños acá adentro, pero como te digo, hay juegos de mesa, entrenamientos individuales o entrenamientos por Zoom cuando es grupal. El que tiene hijos me va a entender, es imposible aburrirse. Siempre están haciendo algo, sino es jugando es peleándose entre ellos (risas). Uno pasa entretenido. Y después le metemos tecnología, me gusta jugar a la PlayStation, juego en línea con un amigo.
¿Qué juega?
Juego el FIFA.
¿Y es bueno?
No, medio pelo, no soy un gran jugador de FIFA pero me la rebusco. Tengo algunas cositas interesantes pero no soy un gran jugador de PlayStation.
¿Juega con la liga chilena?
No, el FIFA no la trae, por lo menos el que yo tengo no la tiene.
El de 2020 sí la trae, aunque con algunos equipos sin licencias.
Entonces ni me fijé. Como jugamos en línea, jugamos amistosos con equipos europeos. No recorro mucho la verdad, pero pensé que no lo tenía.
¿Con qué equipo juega?
Juego con dos, el Barcelona y la Juventus. Antes jugaba con el PSG.
¿Los escoge por Messi y Cristiano?
No. Bueno, creo que tienen a los mejores jugadores del mundo, aparte de tenerlos a ellos dos, que es un plus. Pero no, me gustan por los volantes que tiene el Barcelona y los extremos en la Juventus, con Dybala y Cristiano Ronaldo adelante. La Juventus es más sólida en el fondo que el Barça, pero los laterales del Barça a la hora de atacar son muy importantes.
¿Usa de titular a Vidal?
Sí, a Vidal lo pongo de titular, me llega mucho al gol cuando lo uso. Entonces, el medio campo de Barcelona es Busquets, De Jong y Vidal. Al que dejo en la banca es a Suárez.
¿Por qué?
Porque me gusta más el estilo de Griezmann de 9, entonces juego con Dembélé por izquierda, Griezmann de 9 y Messi de media punta por derecha, más o menos.
¿Cómo cree que ha actuado el Gobierno ante la crisis?
Sinceramente yo del tema salud no entiendo mucho, pero están a la vista los resultados. Ya son demasiados los infectados que hay, ojalá que no siga colapsando todo el tema de salud. Es un momento complicado. No debe ser fácil manejar un país con una pandemia, con algo tan nuevo, pero venía información desde Europa, y a lo mejor no se tomaron los recaudos necesarios. Aunque seguramente ante las decisiones que debe tomar la gente que maneja el país, está lo económico, y es lógico, recordemos que Chile también venía de estar dos meses parado del año anterior. La gente también tiene que salir a trabajar, entonces es un tema complicado. Ahí se puede opinar desde distintos puntos de vista, entonces no tendría yo una definición exacta de cómo actuó, de si actuó bien o mal.
Deportes Iquique iba bastante mejor que en el 2019. ¿Cuáles son las claves de este equipo?
Sí, la verdad es que nos costó en el arranque y era sabido que podía pasar eso, porque este es un plantel prácticamente nuevo, con muchos jugadores nuevos y hay una cuestión de tiempo, que un equipo necesita para afianzar una idea, para ir conociendo. Creo que con el correr de los partidos hemos mejorado. Hemos agarrado una rachita linda de tres partidos sin perder con dos victorias. Pero creo que pasa por el conocimiento de los jugadores, por entender primero la idea del entrenador que es bastante clara y después por el conocimiento de nosotros dentro de la cancha. Veníamos bien, veníamos en pleno ascenso, pero nos paró este virus y ojalá que cuando retomemos sigamos por ese camino y poder seguir mejorando, porque creo que hay un muy buen plantel, de muy buenos jugadores y un cuerpo técnico muy capaz por lo menos para no sufrir con el tema de abajo.
¿Cómo lleva Iquique el tema de los sueldos?
Los dirigentes de acá se han portado espectacular con nosotros. No tuvimos problemas con el tema ese, hubo un acuerdo a la semana que empezó todo esto, un acuerdo que se hizo prácticamente en dos horas. No hubo que negociar prácticamente nada. Hubo una reducción mínima de salario con devolución dentro de este mismo año. Nosotros como jugadores y plantel estamos agradecidos por el trato que han tenido los dirigentes, porque hemos visto que en otros equipos ha estado muy complicado el tema.
El año pasado jugó en Uruguay (Nacional) y ahora vuelve a Chile. ¿Qué pasa que siempre regresa?
Mi ida a Nacional fue porque quería probar el fútbol uruguayo, en un club grande de América. He obtenido experiencias y he podido salir campeón tres veces en Uruguay, la Supercopa, Torneo de Clausura, y el anual. Estoy muy feliz por ese paso pero no jugué todo lo que he querido por distintos motivos. Creo que donde me iba a sentir más cómodo junto con mi familia era acá en Chile.
¿Existen posibilidades de que regrese a la U?
Lo veo muy difícil. Yo cuando me fui de la U sinceramente no tenía pensado regresar a Chile, pero por distintas circunstancias se dio que volví. Pero no me pongo a pensar así, el día que me fui dije que había cerrado un ciclo porque así lo sentía en ese momento. Lo que vendrá más adelante no lo sé. Hoy, más allá de no poder jugar, disfruto de estar en Iquique.
Pero el cariño sigue intacto, ¿o no?
Sí, eso es recíproco. Yo siempre lo digo, una parte de mi corazón es de la U. Es mi casa, donde pasé siete años y medio maravillosos, con logros importantes y otros más comunes. Hemos logrado títulos nacionales, supercopas, Copa Chile, y ni hablar de la Copa Sudamericana. También pasé momentos malos, pero esos son los que a uno lo hacen aprender, madurar y ganar experiencia. Donde yo me cruzo con un hincha de la U siempre son muy agradecidos.
¿Le gusta el equipo actual de la U?
Creo que se armaron bien, en puestos claves con jugadores de jerarquía. Si bien no brilla es un equipo bastante sólido que ha sumado puntos. Después está el tema de la confianza, creo que tienen muy buenos jugadores y a medida que vayan logrando resultados van a ir mejorando en su juego. Es uno de los equipos animadores, de los que se les exige siempre pelear el campeonato hasta el final, y no tengo dudas de que lo va a hacer.
¿Qué le parece el nivel de Montillo?
Walter es un jugador bárbaro, de clase mundial. Donde fue triunfó. No voy a descubrir yo las condiciones fantásticas que tiene.
¿Y qué opina de la salida de Johnny Herrera?
No muchos esperan que se vaya un ídolo, para mucha gente el mayor ídolo en la historia del club. Por lo pronto, es el tipo más ganador de la historia, y eso va a quedar siempre hasta que alguien se lo arrebate. Lo más importante y lo que Johnny sabe es que el cariño de la gente es infinito hacia a él, entonces creo que con eso se puede ir tranquilo y se fue así seguramente. Tendrá las ganas también de en algún minuto volver y retirarse con la camiseta que tanto le dio.
¿No se trata bien al ídolo en la U? Incluyéndolo.
No es un tema comparable con lo mío, porque lo mío fue una decisión más personal, sentía que había cerrado un ciclo. El tema de Johnny es diferente, pero no me quiero meter en un tema que desconozco, porque yo ya no estaba dentro del club. No quiero caer mal a nadie con alguna declaración.
Uno de sus excompañeros en la U la rompe en Europa, Charles Aránguiz. ¿Se imaginó ese ascenso en su carrera?
Sí, en una entrevista que hice al mes de llegar a la U me preguntaron qué jugador me había sorprendido en los entrenamientos, y yo di el nombre de Charles Aránguiz. Por ahí hubiese sido más fácil decir Eduardo Vargas que en ese momento era la figura, pero a mí Charles me sorprendía, siempre estaba bien parado para recibir la pelota, marcaba, creaba, hacía goles, es un jugador muy completo. Era cuestión de tiempo que llegara donde llegó. Para mí es de los mejores jugadores de Chile.
¿Y cómo recuerda su personalidad?
Era tímido cuando había mucha gente, pero en la interna muy simpático y agradable. Es un fenómeno.
Consiguió su nacionalidad chilena hace algunos años. ¿Nunca se le abrió la puerta en la Roja?
No, porque me nacionalicé en 2016, creo que fue ese año. En su momento, en el 2012, Jaime Vera llamó a mi representante y le preguntó si tenía intenciones de nacionalizarme, porque podía haber una chance de citación. En ese momento opté por decir que no, porque sentía que era demasiada presión estar en la U como para enfocarme en otra cosa. No sentí la necesidad de hacerlo.
¿Se arrepiente?
No. Uno con las decisiones busca estar tranquilo y ser feliz, yo priorizo esas cosas. En ese momento enfocarme en la U, estar con mi gente, me daba la felicidad, no otra cosa. No me arrepiento de eso.
¿Hoy ya sería tarde esa opción?
Sí, era ese momento o nada.
Entonces su nacionalidad no fue por lo deportivo.
Era un tema de que la U también necesitaba liberar un cupo. Y por el otro lado, yo tengo tres hijos chilenos y yo también me siento parte de este país, he vivido casi la mitad de mi vida acá. El día de mañana es muy probable que viva acá.
¿Qué será de usted luego del fútbol?
Hoy en día no lo sé. Hay días que me levanto con gustos de ser entrenador, pero no el principal, sino un tiempo ayudante. Me gusta también el tema del scouting, mirar fútbol, seguir jugadores, tratar de descubrir talentos en chicos más jóvenes, trabajar en escuelitas… estoy muy indeciso en ese tema. Son esas las posibilidades que veo, la decisión se va ir dando cuando ya no me motive a entrar a una cancha.
¿Alguna vez ha descubierto un talento en el barrio?
No, pero cuando estoy en Rosario o donde haya partido de juveniles me gusta mirar. Estamos hablando de chicos de 12 o 13 años. Me gusta observar los controles, los pases, cómo se posicionan en la cancha, analizar todo eso. Es algo que me interesaría hacer más adelante.
Tuvo buen ojo con Charles Aránguiz, al menos.
Sí jaja, pero a Charles lo descubrió el que lo llevó primero a Cobreloa.