Los últimos días fueron negros en la vida de Gustavo Quinteros. El viernes no le renovaron el contrato en Colo Colo y este lunes recibió duras acusaciones de parte del timonel del CSyD Colo Colo, Matías Camacho. Por lo mismo, era muy importante escuchar su versión.

“Con Edmundo Valladares y Edison Marchant las cosas hubiesen sido distintas. No sé por qué existió ese cambio, pero fue perjudicial para el club. La mayoría de los jugadores no tiene relación con ese personaje que no existe y salió a hablar ahora y esperó a que yo me fuera para tratar de difamarme”, disparó el adiestrador en conversación con TNT Sports.

Luego agregó que “la mayoría de la gente inteligente que me conoce y sabe cómo soy, no caerá en estas mentiras.... A veces iba cuando ganábamos, nos visitaba en el camarín, pero los jugadores no tenían una relación directa. No quiero hablar de él, porque para mí no tiene importancia, pero habló de que tenía mala relación con jugadores y los primeros que me llamaron cuando se supo que no me quedaba fueron Maxi Falcón, Esteban Pavez y Emiliano Amor”.

Acto seguido, insistió en que “no quiero darle más minutos a este personaje, ni poner a mi nivel a alguien que no hizo nada positivo por el club. Si me hablas de Valladares y Marchant, te digo que son unos fenómenos. Siempre estuvieron en las buenas y en las malas y son muy apreciados por los jugadores. Pero no este personaje, porque es todo lo contrario”.

Su relación con los representantes

El estratega transandino continuó pegándole a la máxima autoridad del CSyD y verbalizó que “sé que hay personas que no valoran nada. No valoran el camino ni el proceso. Pero yo sí. Para mí es importante cómo te reinventas en periodos difíciles y buscas las posibilidades para conseguir el objetivo, que era pelear el campeonato. Por eso, más allá de la aparición de estos personajes que critican o andan mintiendo, yo estoy tranquilo y feliz con lo que pude hacer en Colo Colo”.

Luego desmintió que tuviera relaciones con los representantes y lo graficó de la siguiente manera: “A mí no me metió ningún representante en Colo Colo. A mí me llamó directamente Marcelo Espina (cuando era el gerente deportivo de ByN). Yo no tengo representantes. A mí, si alguien me trae una oferta de un club que me interesa, lo valoro y lo arreglo. Esta gente quiere desprestigiar o ensuciar para evitar que los sigan criticando”, expuso.

Y sin que le volvieran a consultarle, detalló que “si yo tuviera algo turbio, el 90% de los jugadores que llegaron tendrían el mismo representante y no es así. Es fácil desmentir a los difamadores, es cosa de preguntarle a los jugadores quién es su representante y cómo llegaron a Colo Colo. Por eso no tengo duda de que la gente que me conoce y me quiere, no le va a creer a este personaje”.

Además, enfatizó que no había desgaste entre él y sus dirigidos, pues “tengo una gran relación con los jugadores y que yo exija lo que quiere la gente es una cosa y que ellos lo hagan es otra. Y no piensan hacerlo, porque les dije que me quedaba para que diéramos un paso más allá en lo internacional, pero votaron para sacarme”.

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