Habla el abogado que le abre la puerta del Mundial a Chile: “Si no tuviéramos pruebas sólidas, no habríamos interpuesto nada en la FIFA”
El brasileño Eduardo Carlezzo encabeza la ofensiva nacional en Zúrich que podría llevar a la Roja al Mundial por la vía administrativa. Dice estar absolutamente seguro de que el lateral del combinado del Guayas nació en Colombia, a la luz de los antecedentes que tiene en su poder.
Eduardo Carlezzo se nota tranquilo. Sentado en su despacho, atiende a La Tercera para explicar el significativo paso que está dando Chile en la FIFA: la federación recurrió ante el organismo que rige al fútbol mundial para reclamar por la participación irregular del lateral Byron Castillo por la selección de Ecuador en las últimas Eliminatorias. A Carlezzo y al directorio del fútbol chileno, que encabeza Pablo Milad, les asiste la convicción de que el jugador es colombiano. Y, por lo tanto, que resulta absolutamente pertinente el inicio de las acciones tendientes a que los del Guayas pierdan las unidades que consiguieron con su inclusión, las que pasarán a los rivales que enfrentaron. En esa ecuación, la Roja sale favorecida, pues obtendrá los puntos necesarios para rematar el proceso en el cuarto puesto. Es decir, para conseguir la clasificación directa al Mundial que se jugará en noviembre en Qatar.
Al abogado le ha correspondido reunir las pruebas para sustentar la acción. No es primera vez que lo hace. También le correspondió representar a Chile en una controversia similar frente a Bolivia, por la utilización del paraguayo Nelson Cabrera en las Eliminatorias para el Mundial de Rusia 2018. Esa vez, el resultado de la diligencia fue favorable, pues la Roja obtuvo los puntos. Sin embargo, el desenlace fue triste, porque el equipo de Juan Antonio Pizzi no logró clasificarse a la cita planetaria. En esta ocasión, en cambio, las matemáticas favorecen los cálculos.
Los antecedentes, que informó El Deportivo, parecen darle fuerza al recurso. “Certificado de nacimiento falso, falsa declaración de edad y falsa nacionalidad”, son los principios que la sustentan. Carlezzo aclara que la convicción se genera después de una corta, pero intensa investigación. Para él, no hay dudas.
Se ha conocido la acción que está interponiendo la federación chilena, ¿puede profundizar al respecto?
Desde que los hechos tomaron crecimiento internacional, que fue el martes de la semana pasada, donde explotó la bomba en la prensa, nosotros nos pusimos a investigar el tema. La federación nos pidió mucha cautela, mucha seguridad y que nos pusiéramos a analizar los hechos y los documentos que estaban disponibles. Entonces, nosotros, esos días, nos hemos puesto a realizar una investigación bastante rápida y compleja, porque el plazo era corto. Tuvimos que actuar en varios países para recoger información. Para mi sorpresa total, la cantidad de información que hemos recopilado es muy grande. Muy grande. Me sorprendió, incluso. Hoy, estoy convencido de que es colombiano. Lo puedo decir desde una perspectiva personal. Estoy convencido de que es colombiano. La documentación es bastante sólida y extensa en ese sentido. Cuando recopilamos y vimos lo que se ha hecho, vimos que se han hecho muchas cosas, muchas investigaciones. El tema era de total y absoluto conocimiento de la federación ecuatoriana. Sabía de las sospechas que había en torno al jugador y, más, existían documentos internos de la propia federación que concluían de una manera perentoria que el jugador era colombiano. Por eso, en base a esa documentación, no teníamos ninguna otra alternativa que ofrecer a FIFA una denuncia. Los hechos son muy graves y merecen, desde ese punto de vista, una sanción muy fuerte.
¿La decisión de recurrir a la FIFA responde a esa convicción? ¿De no haberla tenido, Chile no habría denunciado?
Seguramente. Yo repito que el presidente Milad nos pidió siempre mucha tranquilidad y cautela, que es exactamente lo que hemos hecho. No hemos tomado ninguna decisión precipitada y todo lo que se hizo fue con base y evidencias. Así que si no hubiéramos identificado que había realmente, y lo quiero decir con mucha fuerza, pruebas sólidas, no habríamos interpuesto nada en la FIFA.
En Ecuador aseguran que el conflicto sobre la nacionalidad de Byron Castillo se resolvió en 2017, con documentos oficiales que acreditan que no es colombiano sino ecuatoriano y que por eso lo comenzaron a convocar. Y, por cierto, que esta acción chilena carecería de éxito.
Debo decir que desconozco cualquier documento fechado de 2017 que sea claro y definitivo en ese sentido. Muy por el contrario, tenemos documentos de 2018 que dicen lo contrario, conclusiones internas de la propia federación, que llevan a entender que el jugador es colombiano.
También plantean que de no haber estado convencidos de que era ecuatoriano, no lo habrían convocado. Y que por eso no lo llamaron antes a la selección.
Es una pregunta que tienen que responder ellos. Ellos tenían los antecedentes, sabían de todo, sabían de los riesgos. Ahora tienen que pagar las consecuencias.
“Basta una negligencia”
¿Hay dolo en este tipo de acciones o solo se trata de un descuido?
Quiero decir que no existe ninguna negligencia ni descuido acá. La federación era consciente. Era totalmente consciente. Las reglas de FIFA, para que dejemos claro, también, como trata el tema el Comité Disciplinario, tampoco demanda dolo para una situación como esta. Una simple negligencia o descuido ya es suficiente para responsabilizar como solidaria a la federación ecuatoriana. Pero no es el caso. Acá eran conscientes. Sabían que han hecho y por qué lo hicieron.
O sea, Ecuador quiso sacar ventajas con Castillo...
Aparententemente, el jugador estaba jugando a un nivel tan alto que era imposible dejarlo afuera, porque era una desventaja deportiva en la cancha. Por eso lo convocaron.
¿Donde nació Castillo, de acuerdo a su investigación?
En Tumaco, Colombia.
¿Y por qué Ecuador asegura que nació en General Villamil, en su país?
La federación ecuatoriana presenta un documento, una partida de nacimiento que viene de esta ciudad, pero ese documento no pasa ningún filtro legal. Tampoco existe en el registro nacional. Por eso, existen innumerables pruebas de que ese certificado es falso.
A propósito de eso, ¿han tomado contacto con autoridades civiles ecuatorianas para recabar información?
No.
¿Lo harán?
En este momento, no lo necesitamos. La cantidad de pruebas y el nivel de ellas es suficiente para comprobar que el jugador es colombiano.
Claro, pero Ecuador podría esgrimir que sus autoridades lo acreditaron como ecuatoriano y eso podría producir un conflicto.
En este momento, no sabemos cómo se pueden comportar las autoridades ecuatorianas, así que estamos seguros de lo que tenemos en mano. Y diría que para nosotros es suficiente para llegar a la conclusión de que es colombiano.
¿Qué pasos procesales seguirá este caso? ¿Cuánto puede demorar en resolverse?
Ingresamos esta denuncia ayer. Hoy por la mañana, muy temprano, FIFA ya comunicó formalmente la recepción. Ahora esperamos un trámite: la apertura o formalización de un procedimiento disciplinario y la comunicación a la federación ecuatoriana y al jugador para que presenten sus argumentos.
El Mundial es en noviembre. ¿Alcanzan a fallar?
En lo general, si aplicamos los plazos generales de procesos así, probablemente no alcanzaríamos a tener una resolución final antes de noviembre, porque son tres instancias: la Comisión Disciplinaria, la Cámara de Apelaciones y el TAS. Pero aquí estamos frente a una situación que es muy singular. Que es grave por un lado y cuyas consecuencias deportivas también son serias, pues eliminarían a una selección de un Mundial. Entiendo, sí, que se pueden achicar los plazos y eso ya ha pasado en casos anteriores donde se demandó mucha urgencia en la apreciación de las pruebas y en la decisión. Entiendo que es posible que tengamos una resolución, pasando por las tres instancias, antes del Mundial.
¿Da por hecho que irán al TAS?
Nosotros entendemos que cualquiera de las partes, seamos nosotros o la federación ecuatoriana, va a agotar todos los procedimientos posibles. Por eso, vemos el asunto llegando al TAS.
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