La espera de una obvia resolución llegó a su fin. Lewis Hamilton completó su hazaña y elevó su nombre, otra vez, a lo más alto del automovilismo mundial. En el Gran Premio de Estados Unidos, 19ª fecha de la Fórmula Uno, el británico finalizó segundo, pero le bastó para cerrar su sexto título en la máxima categoría del deporte motor.
Con dos carreras aún por disputar, Hamilton concluyó una nueva copa a su favor. A Austin llegó con una favorable distancia sobre su escolta, Valtteri Bottas (y ganador en Estados Unidos), que le permitían consagrarse incluso siendo octavo. Otras combinaciones también le coronaban, pero su segundo puesto facilitaron los cálculos.
La carrera en Estados Unidos no tuvo mayores novedades. Salvo el adelantamiento de Bottas sobre Hamilton a tres vueltas de terminar. El triunfo en el Circuito de Las Américas significó la cuarta victoria del finlandés en la temporada. Lo que también fue llamativo fue la baja de rendimiento de los Ferrari. Sebastian Vettel debió abandonar en la novena vuelta, por un problema con la suspensión de una de sus ruedas delanteras, mientras que Charles Leclerc finalizó cuarto.
El tercer equipo grande, Red Bull, terminó con sus pilotos Max Verstappen y Alex Albon en el tercer y quinto lugar, respectivamente.
Con la obtenida en la presente temporada, a la que le faltan las carreras en Brasil y Abu Dabi, Hamilton sumó su sexto título mundial. En 2008, junto a McLaren, consiguió su primera corona. En aquella oportunidad, con 23 años, nueve meses y 26 días, se había convertido en el campeón más joven, cetro que dos años después le quitó Sebastian Vettel.
Luego de años sin volver a ganar con McLaren, firmó en 2013 con Mercedes, con quienes hasta hoy ha seguido agigantando su leyenda. Incluido el recién obtenido, Hamilton también se impuso en 2014, 2015, 2017 y 2018. Todos se rinden ante Lewis, ante el imparable piloto británico que se acerca al récord de siete campeonatos que tiene el alemán Michael Schumacher, como el más ganador de la historia. ¿Podrá alcanzarlo? Al menos, el nacido en Stevenage, sigue una senda provechosa.