Durante las primeras horas de la mañana de este viernes se supo de la detención de Gary Medel, hijo homónimo del futbolista de la Selección Chilena debido a una denuncia de violencia intrafamiliar. Según había indicado las autoridades que llegaron al lugar, el joven de 18 años habría golpeado a su pareja en un departamento ubicado en la comuna de Las Condes después de haber sostenido una discusión en un restaurante.
Así, el comandante José Vielma, de la 17ª Comisaría de Carabineros de la comuna, había indicado que “efectivamente, y según versión de testigos y de las propias víctimas que estaban en el lugar, hacen mención a que hubo una agresión mutua de esta pareja, por lo cual Carabineros procede a la detención de este ciudadano y, posteriormente, lo traslada a la unidad policial”.
Agregó que “esto se inicia principalmente en un contexto de una discusión en un restaurante. Posteriormente, esta discusión se traslada al departamento que compartían ambos”.
Finalmente, el uniformado señaló que “el inicio de la agresión, según el relato de la víctima, manifiesta que él la habría agredido y producto de eso ella se habría defendido”.
De esta forma Medel quedó a disposición del Ministerio Público donde pasó a un segundo control de detención para ser formalizado por el delito de lesiones leves en el contexto de violencia intrafamiliar.
Sin embargo, la conviviente del acusado aseguró a través de un posteo en sus redes sociales. “Para todos los que se preocuparon estoy bien. Todo es un mal entendido como cualquier pareja”.
Además fue enfática al referir que “no hubo golpes así que todo bien. Todo lo exageran, gracias por preocuparse”.
Estas palabras, que fueron ratificadas en la Cuarto Juzgado de Garantía de Santiago, permitieron que el tribunal decidiera no imponerle ninguna medida cautelar, a pesar de la solicitud de la Fiscalía de proteger a la víctima.
De todas maneras, el joven de 18 años deberá someterse a un examen psiquiátrico con el fin de crear un informe que permita esclarecer lo sucedido durante el viernes.