Inglaterra espera en Rusia el apoyo de más de 10.000 personas que viajen desde la isla. Eso sí, 1.312 no podrán hacerlo por estar vetados de entrar a los estadios, según informó la Autoridad de Órdenes de Prohibición en el Fútbol (FBOA por sus siglas en inglés), el organismo del Ministerio del Interior inglés.
El método es recuperar los pasaportes que hayan sacado esas personas para evitar su viaje a Rusia. Acorde a la policía inglesa, 1.254 han sido requisados hasta este miércoles.
"El Mundial es la fiesta del fútbol y no hay espacio para la violencia o los desórdenes", expresó Nick Hurd, secretario de Estado encargado de Policías y Bomberos.
Además, una delegación de la policía británica trabajará junto a oficiales rusos para que no hayan problemas con sus hinchas. Definitivamente, Inglaterra no quiere hooligans en el Mundial.