No solo la lluvia ha sido protagonista en Wimbledon, con la amplia postergación de partidos que afecta al torneo desde ayer, sino que el certamen también se vio interrumpido por una protesta que alteró la normalidad.
El episodio ocurrió en la Cancha 18, donde el búlgaro Grigor Dimitrov enfrentaba al japonés Sho Shimabukuro. En ese momento la seguridad fue sorprendida por el ingreso de dos activistas ecologistas del grupo Just Stop Oil, que invadieron el campo.
Luego procedieron a rociar el césped con un producto y desparramaron confetti de color dorado, que habían ocultado en una caja de un rompecabezas oficial de Wimbledon, de esas mismas que se pueden adquirir en las tiendas del All England Club.
El hecho fue tan sorpresivo que incluso uno de los manifestantes logró sentarse durante unos instantes en medio de la cancha. Posteriormente fue reducido por los guardias y evacuado, sin que opusiera resistencia. El público, en tanto, no se vio muy contento y lo despidió entre abucheos.
La situación no es nueva. En otras ediciones ya habían ocurrido situaciones similares, por lo que la organización ya se había preparado. Recientemente eventos de cricket, rubgy y snooker habían sufrido situaciones similares.
Los jugadores, por su parte, continuaron luego de la interrupción y el triunfo fue favorable a Dimitrov, quien se impuso por 6-1, 6-2 y 6-1.
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