El Superclásico vivió un gran primer tiempo de Universidad de Chile y un complemento donde Colo Colo buscó igualar, no sólo lo propuesto por su rival, sino también el marcador.
El mismo que fue abierto a través de una buena jugada de Maximiliano Rodríguez, el anticipo de Israel Poblete y el desafortunado rebote en la cabeza de Alan Saldivia. Y esa aparición de Poblete cambió el partido y se lo entregó a la U.
El volante de la escuadra estudiantil se ganó el calificativo de “clasiquero”, pues ya le había anotado dos veces a Universidad Católica en la temporada pasada y ahora participa de la acción que le quitó los nervios a sus compañeros, en un escenario que desde hace más de dos décadas le era inexpugnable.
Además, manejó los hilos en el medioterreno y opacó el desempeño de Marcelo Díaz. Una muestra de ello, es que en los últimos minutos se atrevió a luchar la pelota con tres jugadores albo y salió airoso, en los momentos en que sus compañeros ya sólo reventaban el balón y esperaban que el tiempo pasara lo más rápido posible.
Y así como Carlos Garrido ingresó a la historia del partido más importante del fútbol chileno, marcando el gol del triunfo en aquel lejano septiembre de 2001, Poblete será recordado como el hombre que rompió la maldición del reducto mapuche y le devolvió las victorias a los representantes de la Casa de Bello tras once años de frustraciones.
“Es segunda vez que estoy en este estadio y la otra vez, me quedé con la espina clavada porque creo que lo pudimos haber ganado”, fue lo primero que dijo el ahora nuevo referente de los de La Cisterna en los micrófonos de TNT Sports.
Luego agregó que “estoy feliz por el resultado, por el rendimiento personal y por lo que le aporto al grupo. Pero ahora debemos ir partido a partido, para poder seguir escalando en el Campeonato”. Finalmente, el autor del único gol del partido concluyó que “estos son partidos que uno debe dar más y espero sostener esto en todo el torneo”.
Poblete llegó a la tienda académica el año 2022 y desde entonces ha mantenido una regularidad que pocos lograron en la transformación de este equipo, el cual salió de pelear el descenso a sumar nueve de nueve en este inicio de la competencia local.
El 2022, el mediocampista sumó 2041 minutos en 25 partidos jugados, con 23 titularidades. Al año siguiente logró 2111 minutos y 23 estelaridades y ahora ha disputado los 180 minutos completos.
Este es el tercer gol que marca con la tricota azul, como le informábamos, ya había tenido la chance de celebrar dos veces contra la Católica y ahora, sin duda, se inscribe para siempre en el tablero del coloso de los fundados por David Arellano y en el corazón de una hinchada, que según Marcelo Díaz, “siempre creyó” que este once que será recordado para siempre por azules y albos.