Extraordinario. Es una palabra que perfectamente puede definir la temporada que está teniendo James Harden. El campeón del mundo y oro olímpico con Estados Unidos está viviendo su año más anotador y su camino parece pavimentado a repetir el MVP de la NBA que consiguió en 2018. La Barba deslumbra partido a partido y sus números sobrepasan las expectativas. Como muestra, ante San Antonio, el pasado viernes, dejó nada menos que 61 puntos.
La marca que consiguió ante los Spurs fue la segunda vez en la presente edición de la NBA en que el ex Oklahoma hace 61 puntos. La primera fue en enero, en el triunfo de Houston sobre New York Knicks. "Trabajo cada día para ser el mejor que pueda ser. Tengo la oportunidad de convertirme en uno de los mejores jugadores de básquetbol de siempre", dijo a NBA TV tras vencer a San Antonio.
En esa carrera por meterse entre los mejores de la historia ya se equiparó con uno que sí cabe en ese rótulo. Solamente Kobe Bryant había hecho más de 60 puntos en más de un partido en un mismo año. La leyenda de Los Angeles Lakers, además, es dueño de uno de los mejores promedios de puntos por partido en una temporada, con los 35,4 que marcó en 2005-06. Hasta en eso le amenaza Harden, quien tras el juego de ayer ante los Pelicans, donde aportó 28 puntos, dejó su actual promedio en 36,3.
Eso sí, aún le falta para convertirse en el mejor promedio histórico en una sola temporada. Lejos están los inalcanzables números de Wilt Chamberlain, a quien muchos postulan como el mejor jugador de todos los tiempos. Junto a Philadelphia Warriors (hoy Golden State), hizo la locura de 50,4 puntos por partido en 1961-62; 38,4 en 1960-61; y 37,6 en 1959-60. Además, cuando la franquicia pasó a llamarse San Francisco, aportó 44,8 en 1962-63.
Aunque con dificultad, pero con mayor cercanía, Harden está al acecho de los 37,1 puntos por partido que Michael Jordan dejó en 1986-87 junto a Chicago Bulls. Más sencillo de romper aparecen de los 35,6 que Rick Barry hizo en 1966-67 defendiendo a San Francisco Warriors.
Chamberlain, Jordan, Bryant y Barry, cuatro leyendas que inspiran a La Barba, cuya temporada aún no termina. Ocho son los partidos que le quedan a los Rockets y, según publicó la NBA en su sitio oficial, de anotar 349 puntos más en sus restantes juegos igualaría la marca de la histórica figura de los Bulls.
Por otro lado, todos los equipos de la mejor liga de básquetbol del mundo lo han sufrido. Es más, es el único jugador en la historia que le ha hecho más de 30 puntos a cada una de las 29 franquicias que lo desafiaron en una misma temporada. Atlanta era el rival que en 2018-19 aún no padecía el arrollador paso de La Barba, pero lo sintieron de cerca el pasado martes 19 en la derrota ante los Rockets, donde Harden aportó 31 puntos.
Y si de seguir comparando se trata, Bryant en 2005-06 le hizo más de 30 a 28 equipos, el que estuvo más cerca de lograrlo. Jordan, en tanto, le marcó más de ese número a 22, cuando el campeonato contemplaba esa cantidad de equipos, es decir, le anotó a todos los posibles. Lo mismo para Wilt Chamberlain, pero en los años 60 no había tantas franquicias.
La temporada más anotadora de Harden tiene a su equipo como terceros en la conferencia Oeste y al jugador buscando su primer anillo. El MVP de la última temporada no para, incluso después de los partidos su entrenamiento continúa, como ha mostrado en redes sociales. James Harden: un talento que no se detiene, una muestra de su bestialidad.