Llegó el momento del último Grand Slam del año. En la cancha dura de Nueva York se disputará el restante de los cuatro torneos más grandes que tiene el circuito de la ATP. El US Open se toma el calendario del tenis mundial en las próximas dos semanas. Al desafío en Norteamérica van dos chilenos. Christian Garin (32º) y Nicolás Jarry (73º) disputan hoy la primera ronda del torneo, con distintas realidades.
El ariqueño enfrentará al estadounidense Christopher Eubanks (188º), a las 11.00 horas de Chile, mientras que Nico se medirá frente al polaco Kamil Majchrzak (94º), no antes de las 17.00. El sorteo había indicado que Nico se enfrentaba al canadiense Milos Raonic (22º), pero una lesión en la espalda hizo que se ayer anunciara su retiro del torneo.
Garin jugará por primera vez el cuadro principal del torneo. Y de qué forma, ya que por su ranking y unos resultados de otros rivales en el ATP de Cincinnati, le permitieron ser cabeza de serie. Es el 31º sembrado, por lo que no podrá medirse con jugadores de mejor escalafón que él hasta la tercera ronda.
La situación de Jarry es más compleja. No ha tenido buenos resultados desde los Juegos Panamericanos y mantiene la incertidumbre de cómo seguirá su calendario después del US Open.
La segunda raqueta nacional tendrá un desafío, en el papel, menor al que en un principio enfrentaba. El polaco Majchzrak ascendió al puesto de Raonic como perdedor afortunado, tras haber caído en la tercera qualy.
Torneo grande para jugadores grandes. Ninguno faltará. Roger Federer, Rafael Nadal y Novak Djokovic también animarán la cita estadounidense.
Los chilenos, por su parte, no solo competirán en el cuadro de individuales. Garin y Jarry jugarán juntos el dobles. A mitad de semana enfrentarán al croata Mate Pavic junto al brasileño Bruno Soares, en primera ronda. Por otro lado, Alexa Guarachi, medallista de oro junto a Jarry en las duplas mixtas de los Panamericanos, disputará el dobles femenino junto a la estadounidense Bernarda Pera. Debutan ante las japonesas Eri Hozumi y Makoto Ninomiya.
El sueño americano de los chilenos está en marcha.
