Chile debutó en la ATP Cup, el inédito torneo que comenzó la noche del jueves y que se disputa en Australia como el nuevo mundial del tenis. El combinado nacional enfrentó a Francia en su primera serie por el Grupo A del certamen. En Brisbane, Nicolás Jarry y Benoit Paire fueron los primeros en saltar a la cancha en el campeonato que este año está haciendo su estreno.

Jarry fue el encargado de jugar el primer punto. Sin embargo, pese a un gran arranque de partido, en el que salvó puntos de quiebre y se vio sólido, el primer punto de la serie quedó para los franceses, capitaneados por Gilles Simon, por 7-6, 3-6 y 3-6.

El primer set comenzó mal para el chileno. Al menos el primer juego, ya que Paire quebró recién iniciado el encuentro. La respuesta llegó de inmediato, pero no gracias al buen juego de Jarry, sino que por las cuatro doble faltas que hizo Paire para que el duelo se igualara.

Precisamente el empate fue la tónica para el resto del parcial inicial. Jarry salvó puntos de quiebre en el séptimo juego. Lo mismo hizo el francés cuando Nico se imponía 5-4, pero esta vez salvando puntos de set.

La manga se definió en el tie break, el cual el chileno ganó 7-3, desatando, además, la frustración del francés, quien tiró su raqueta al suelo tras perder el parcial.

El cambio de actitud le vino bien a Paire, que en poco más de media hora se llevó una segunda manga que había comenzado bien para Jarry. El chileno quebró el tercer juego, pero la respuesta de nuevo llegó en el game siguiente. El francés aprovechó un bajo rendimiento del nacional para ganar cuatro juegos seguidos y dejar a tiro su victoria en el set.

En la tercera manga al francés le bastaron dos quiebres, uno de ellos en el juego final, para quedarse con el partido y el primer punto de la serie para su país.

El segundo turno de la jornada se enfrentaron la primera raqueta de Chile, Christian Garin, ante Gael Monfils. El número 10 del mundo sacó a relucir su juego y se llevó el segundo punto para Francia tras imponerse por 6-3 y 7-5.

Difícil inicio de partido para el chileno que se vio sorprendido de entrada con los golpes del francés. Monfils ganó su primer servicio, quebró el de Garin y confirmó el break para entrar ganando 3-0. La frustración apareció en el rostro del nacional, que no podía ante los fuertes tiros del galo.

De ahí en más, cada uno defendió su saque y el francés terminó ganando 6-3 la primera manga. El chileno, pese a recibir el apoyo de su entrenador, Andrés Schneiter y del capitán del equipo chileno, Paul Capdeville, y en ciertos momentos complicar a su rival, no pudo ante la eficacia y experiencia de Monfils, que ganó la manga en solo 31 minutos.

En el segundo set todo parecía que iba a mejorar para el chileno. Su rendimiento así lo indicaba y Garin comenzaba bien, ganando su primer servicio, luego su segundo en el tercer juego del parcial y después quebrando el saque del francés. Tras confirmar el break, la ventaja de tres juegos hacía pensar que el nacional podía estirar el partido. Sin embargo, bajó su nivel y subió el del francés.

Con el partido 4-1 para el chileno, Monfils comenzó a remontar. Dos nuevos quiebres lo pusieron arriba por 6-5 y con su servicio, a pesar de la resistencia de Garin que llegó a estar 15-40, cerró el segundo punto para Francia, que 2-0 se imponía en la serie.

El punto ganado del día lo hicieron los mismos Jarry y Garin, pero jugando juntos el dobles ante Nicolás Mahut y Edouard Roger-Vasselin. Los nacionales dejaron la serie 2-1 gracias a su victoria por 7-5 y 6-2.